Corramos juntos | Nathan y tú

Problemas para la final

-Ahora sin el señor Wintersi es como el aire fuera más limpio – dijo Jack.

-Es como si en un videojuego derrotamos al jefe – añadió Tod.

-La verdad es que has estado genial, me ha impresionado mucho – dijo Nathan.

-¡Qué estilo al echar a la calle a ese profe! – Comentó Timmy imitando a Nelly.

-Sí, tiene mucha clase – añadió Silvia.

-¡Así si se puede afrontar la final de la fase previa! – Intervino Kevin.

-Chicos – todos se giraron hacia mí – si no tenemos entrenador, ¿qué vamos a hacer? Quiero decir, al ser un torneo oficial todos los equipos deben tener un  entrenador, ¿no?

-Tienes toda la razón – aclaró Willy – según las normas del torneo no se permite la participación de ningún equipo sin tener un responsable al mando.

-¿Tú sabías eso Nelly? – Preguntó Mark.

-¡Cla... claro que sí! ¡Por eso ahora mismo os ordeno que encontréis un nuevo entrenado y podéis tomarlo como una orden directa del presidente de la junta escolar!

-¿¡Eh!? – Dijimos al unísono.

-Bueno, el equipo entero debe buscar un nuevo entrenado – dijo Mark con un balón en sus manos.

-Venga chicos – dije levantándome – no podemos permitir que nos dejen fuera del torneo por esto.

-¿Podría ser un entrenador de otro club? – Preguntó Steve.

-Eso sería genial – dijo Jack.

-Que se lo pida doña Nelly Raimon, fue ella quien decidió despedir a Wintersi por su cuenta y riesgo – dijo Kevin.

-Con Wintersi no habríamos llegado ni al partido – respondió esta.

Yo me tensé al oír eso y Nathan me lo notó ya que puso su mano en mi cabeza sonriendo. Ese simple contacto hizo que me relajara, todavía no me explicaba el efecto que tenía este chico sobre mí.

-Se podría decir que ha sido un poco imprudente – continuó Willy – hubiese sido mucho mejor retrasar su despido hasta que tuviéramos un nuevo entrenador.

-¡Ya basta! ¡Lo hecho, hecho está! ¡Debemos esforzarnos para encontrar un entrenador! – Concluyó Mark saliendo de la sede.

-Pero no puede ser cualquiera, tiene que ayudarnos a ganar – dijo Nathan para detener a Mark.

-¿Qué opináis del dueño del restaurante de fideos? Fue él quien nos dijo sobre la existencia del cuaderno secreto. A lo mejor si se lo preguntamos aceptaría – dije pensativa.

-____ tiene razón Mark. Además, conocía a tu abuelo – añadió Axel.

-¡Por supuesto! ¡Vamos al restaurante! – Exclamó Mark.

-¡Por favor, sea nuestro nuevo entrenador! – Dijimos al entrar al restaurante.

-Me estáis distrayendo chicos – respondió este.

-Lo siento mucho – contestó nuestro capitán – pero si conocía a mi abuelo y la existencia del cuaderno secreto quiere decir que usted sabe mucho de fútbol.

-Es posible que haya jugado con el abuelo de Mark e incluso perteneciera al legendario Inazuma Eleven – comentó Bobby.

-¿No os acordáis de lo que os dije sobre las desgracias que trajo ese equipo? – Se quedó mirándonos un rato en silencio, a lo mejor le habíamos convencido. – Chico – refiriéndose a Mark.