Corramos juntos | Nathan y tú

Caos

Narra ____

Esa noche había descansado muy bien y tenía ganas de entrenar. El partido contra Caos en el campo de la Royal sería al día siguiente, así que hoy tendría que dar lo mejor de mí.

-¿Estás segura de que te encuentras bien para entrenar? –Preguntó mi hermana al salir de casa.

-Sí, ya he recuperado todas mis fuerzas, –respondí.

-¡Ay, se me olvidaba! –Buscó algo en su bolsa–, toma, –me entregó la pulsera que pensé que había perdido durante esa noche.

-¡Mi pulsera! Pero, ¿dónde la has encontrado? No me la he quitado desde que Nathan me la dio, es imposible que estuviera en casa, –me la volví a poner en la muñeca.

-Estaba en el suelo, cerca de las bolsas de la compra, cuando salí a buscarte. Al verla supe que algo había pasado.

-Muchas gracias María, pensé que la había perdido esa noche y estaba bastante triste por ello. Es lo único que me une a él, –dije apenada.

-Lo sé, pero ten confianza. Nathan volverá con nosotros.

-Sí... –Miré mi accesorio–, tienes razón.

Durante el camino hacia el Raimon nos encontramos a Mark y Silvia, que nada más vernos me preguntaron si me encontraba bien.

-Bueno equipo, ¡hoy tenemos que ponerle muchas ganas! –Anunció Mark una vez que todos estábamos en el campo preparados para empezar el entrenamiento.

-El partido contra Caos es mañana así que hoy tenemos que entrenar muy a fondo. Marc, Bobby y yo intentaremos reforzar el Triángulo letal 2. Darren y Hurley seguid practicando para conseguir las manos infinitas, –indicó Jude.

-Sí, –respondió el portero.

-Claro, dejámelo a mí.

-María.

-Sí, dime.

-¿Crees que podrías ayudar a ____ con Zodíaco? Hay que seguir reforzando ese tiro también.

-Por supuesto, cuenta conmigo Jude.

-Los demás tenéis que encargaros de afinar la nueva formación con Axel y Byron, –ordenó.

-¡Sí! –Gritamos al unísono.

-Hace tiempo que no te veo con una equipación puesta, –dije sonriendo al ver a mi hermana.

-Es verdad, lo echaba de menos.

-¿Estás segura de que quieres? –Insistí.

-Sí, desde que hablé con Byron, las dudas que tenía se fueron.

-¿No te replanteas jugar en lugar de ser gerente? – Pregunté mientras calentábamos.

-La verdad es que no, he descubierto que me gusta más estar fuera observando. Así, también puedo ayudar a Jude a crear estrategias nuevas.

-Está bien. Pues adelante.

Después del duro entrenamiento todos estábamos agotados. Sin embargo, yo estaba muy satisfecha. Habíamos conseguido incrementar el poder de Zodíaco un poco más. Las ultrasupertécnicas eran un misterio todavía, ya que iban evolucionando poco a poco. De hecho, en algunos de los últimos intentos, pude ver una tenue estela más por encima del resto. No sabía qué podía significar, pero supuse que lo descubriría si seguía mejorando la técnica.

María recogió primero y se fue a casa, mientras que yo decidí quedarme con Jude y Axel. Hablamos sobre el progreso que habíamos conseguido en el día de hoy.