Corramos juntos | Nathan y tú

Inazuma Japón

Narra ____

Esa noche volví a soñar con el unicornio blanco que me ayudó a desvincularme con la piedra Alius. Durante los tres meses que habían pasado aparecía de vez en cuando en mis sueños. Aún no sabía qué era y qué hacía allí, ya que cuando se lo preguntaba se ponía a trotar alrededor de mí. María me dijo que aquel día lo vio cuando Mark y yo combinamos nuestras técnicas, pero no había vuelto a manifestarse de esa forma.

-Mañana tengo un partido que será un punto de inflexión en mi vida, –dije acariciando su lomo–. Aunque tengo miedo de no conseguirlo daré lo mejor de mí, –respondió con un fuerte relincho.

Al día siguiente, nuestra madre nos preparó un abundante desayuno para el día de hoy. Antes de irnos llamó a nuestro padre, que había tenido que irse temprano al trabajo, para darme ánimos para el partido. Lo agradecí mucho.

Cerré la puerta y vi a Nathan apoyado en el muro que se encontraba en frente de nuestra casa. Al vernos nos saludó a ambas y nos dirigimos al Raimon. Según nos íbamos acercando al Raimon, más ruido había. Al entrar me fijé que había venido todos, pero era normal, ya que de aquí saldría la selección japonesa.

Cuando llegaron todos, Silvia nos acompañó al gimnasio para entregarnos las equipaciones oficiales. Era ponerme esta camiseta y me entraban más ganas de jugar al fútbol, era una sensación inexplicable. Luego salimos y nos separamos en nuestros respectivos equipos.

-¡Adelante! ¡Juguemos y démoslo todo! –Animó Mark.

-¡Sí! –Exclamamos todos y salimos al campo.

-¡Bueno! ¡Y aquí estamos, en el campo donde se reúnen las mayores estrellas del fútbol juvenil! –Comenzó a comentar Chester como siempre–, ¡enseguida comenzará un partido que pasará a la historia de este deporte! ¡En él se va a elegir la selección japonesa para el próximo Torneo Frontier Internacional! Se enfrentan el equipo A, capitaneado por Mark Evans, y el equipo B, con Jude Sharpe a la cabeza.

El partido comenzó con nuestro saque de centro por parte de Xavier, quien le pasó a Kevin. Sin embargo, Nathan pudo cortar nuestro ataque y le llevó el balón a Jude. Finalmente, Axel logró superar la defensa de Thor y tiró con su Tornado de fuego 2, pero Mark lo detuvo sin problema con la Evolución de la mano celestial. Estaba segura que este partido dejaría duelos impresionantes como el que acabábamos de presenciar.

Comenzamos nuestro ataque hasta que Shawn le pasó a Kevin para que chutara con el Remate guiverno 2 y se enfrentara a las Manos infinitas de Darren. Sin embargo, Darren detuvo el tiro. Su contraataque fue cortado por David, quien evitó que Caleb avanzara, pero estos empezaron a enfrentarse.

-Vaya cosa, mira que presumir por eso, –dijo el chico con aires de superioridad–, este partido no es para ganarlo y si tienen que tomar una decisión, pues que la tomen. Solo os voy a decir una cosa: solo pienso en mí mismo y nadie más.

-Menudo idiota, –dijo David.

-No te preocupes por él, –hablé llegando a su lado–, solo concéntrate en el partido.

-____ tiene razón, eso es lo más importante ahora.

El balón le llegó a Xavier y no dudó en chutar con su Cañón de meteoritos para obtener la ventaja en el marcador. Volvimos a sacar de centro cuando Marvin empezó a entrar en el campo contrario. Caleb retrocedió y le ordenó a Nathan que viniera a cubrirme, pero antes de que llegara el trillizo me pidió que se la pasara y eso hice. Iba a tirar, pero pitaron fuera de juego. Maldición, Marvin había caído en la trampa del fuera de juego.