Insecurity [Parte II]

Capítulo 82

"Comprendiendo hechos y tomando decisiones"

Harry se encontraba sobre su cama, mirando el techo mientras tenía los audífonos puestos, descansado. 

Más bien, estaba tratando de despejar la mente... tratando de procesar la información que acababa de recibir. 

Aún suspiraba cuando recordaba que ahora era, oficialmente, hijo del profesor snape y Regulus. No conseguía el valor suficiente para llamarlos sus padres en voz alta aún, pero estaba demasiado feliz, aunque en el fondo aún tenía miedo... trataba de encerrar esos pensamientos en el fondo de su mente. 

No solo eso... sino que, por mucho que tratara, no podía apartar las palabras de madame Pomfrey (que había sido llamada a Prince Manor para hablar con él), de lo más consciente de su ser. 

«Mago portador o mago fértil: mago capaz de quedar en cinta y dar a luz.» 

Harry se había sentido bastante desconcertado cuando escuchó por primera vez lo que significaba eso, y aunque hubiera tratado de mantenerse tranquilo, la verdad es que se asustó mucho. 

¡¿Cómo que era capaz de quedar embarazado?! 

No hacía falta decir que eso contradecía todo lo que había aprendido en su escuela muggle, y aunque sabía que los magos tenían muchas diferencias, ¡no pensó que eso sería posible! 

Su desconcierto se transformó en una ligera molestia cuando madame Pomfrey soltó una pequeña risa por su reacción. 

—Tu padre también se asustó cuando descubrió que era uno. 

Ahora volvió a sentir desconcierto, uno mucho mayor. 

—¿Mi padre..? ¿Pero él..?

—James también era un mago portador, Harry —le dijo madame Pomfrey, aunque haciendo una mueca un poco extraña al recordar a su padre—. Por eso ya tenía la sospecha de que terminarías siendo uno también, eso, y porque me había dado cuenta de algunas señales.

No solo para Harry fue una sorpresa descubrir ese dato, sino también para Severus y Regulus. 

—Pero... él... Él y mi mamá...

—Naturalmente, aunque uno mago tenga la capacidad de albergar vida, no significa que no sea capaz de tener hijos de la manera convencional con una mujer, o incluso con otro mago fértil —aclaró ella—. Y dudo que James alguna vez estuviera interesado en alguien distinto a Lily: la de veces que lo tuve que curar porque ella lo hechizaba luego de sus intentos de coqueteo. 

Esta vez, Harry no pudo evitar soltar una pequeña risa, aún con la nostalgia que siempre sentía al escuchar sobre la adolescencia de sus padres. 

—Quiero que entiendas, Harry: aunque seas un mago portador, no estás obligado a quedar embarazado. Así como las mujeres no solo por tener la capacidad de hacerlo tienen que quedar embarazadas sí o sí, ellas deciden. Es tu decisión, solo eso. 

Un poco más tranquilo, Harry asintió. Al menos saber que su padre James también fue un mago fértil lo ayudaba a calmarse... aunque no a su curiosidad, claro. 

—Entonces, soy un mago fértil... ¿Cómo es que no había parecido antes en mi prueba de sangre?—quiso saber—. Mencionó unas señales... ¿salían en mis historiales médicos?

—No, me refiero a tu fisionomía —lo señaló con su varita, haciendo que Harry retrocediera en su asiento de forma instintiva. Ella lo miró con algo de pena, pero siguió su explicación—. Estoy segura de que notaste que tus caderas son más anchas que la de otros chicos.