Insecurity [Parte II]

Capítulo 81

"Incluso en los malos momentos hay alegrías"

Hacía poco más de un mes que Voldemort había vuelto, y las cosas no se estaban poniendo más fáciles para nadie... nadie que no decidiera ignorar este hecho en pos de tener una falsa seguridad, claro está. 

Harry estaba practicando en el jardín de Prince Manor en esos momentos, no solo para tratar de mejorar sus habilidades de duelo, sino porque necesitaba distraerse. 

Sus compañeros casi no le habían escrito en esas vacaciones, solo recibió unas pocas cartas que no tenían mucho que ver con la situación actual en la que se encontraban. Bien, de Hermione debería esperar algo así, ya que al ser hija de muggles, no es que tuviera más información que él por el periódico mágico; de hecho, probablemente él tenía más información que ella. Hablaban de vez en cuando usando los celulares, pero no había mucho que decir. Ron solo le decía que sus padres estaban metidos en algo, pero no le decían qué era. Ni siquiera los gemelos sabían lo que ocurría. 

Theo por su parte fue mucho más honesto en su carta: Dumbledore les pidió que no pusieran información en las cartas porque podían ser interceptadas. Lo que era casi perdirles que no le escribieran, ya que solo lo hacían para compartir información, raras veces solo para saber cómo estaban. 

Harry se sorprendió un poco, y aunque algo molesto, terminó por aceptarlo. De cualquier forma, estaba seguro de que tampoco se perdía de mucho... Otra cosa hubiera sido si estuviera en la casa de los muggles... pero allí tenía una idea de lo que pasaba, por lo que no estaba tan nervioso por el tema. 

Regulus le había pedido que se concentrara en las citas con el psicomago y sus prácticas, que luego le contaría todo lo que pudiera en cuanto hubieran arreglado algunas cosas. 

No estaba contento, claro, pero aceptó sin replicar como siempre. Solo tenía que ser paciente... e incluso no lo pareciera, era algo que podía hacer. 

Aunque sería un poco más fácil si su padrino no fuera tan boca suelta y dejara escapar uno que otro dato que aumentaba su curiosidad. A veces parecía que lo hacía a propósito para probarlo, y Harry no estaba seguro de qué tanto podría hacerlo si seguía así. 

Por supuesto, era solo una casualidad el que sea un poco más agresivo con él cuando lo ayudaba a practicar duelos. 

La práctica de hechizos iba bien: ya se estaba aprendiendo el plan escolar del último curso de Hogwarts de DCAO y una que otra lección de Encantamientos, aunque no podía adelantar tanto de esta última: debía decirlo, las lecciones que enseñaban eran un poco... inútiles, al menos en muchos casos. 

Las visitas con el psicomago... no estaban dando muchos resultados, pero apenas iba a cumplir el mes de ir, así que era de esperarse... o eso le decía el sanador, él realmente no sabía cuánto tiempo le tomaría "recuperarse".  

Si era honesto, no tenía la menor idea de si el sanador estaba enterado o no de la vuelta de Voldemort, y si lo sabía, tampoco estaba seguro de si le creía o, por en cambio, pensaba que era un loco, tal como la gran mayoría del mundo mágico pensaba desde que Rita Skeeter lo había hecho ver como un trastornado mental. 

De cualquier forma... no estaba seguro de la razón, pero tampoco le importaba demasiado si le creía o no, o si pensaba que estaba loco o no. Quizá era porque, incluso si creyera que tenía un problema mental, no le diría a nadie, y solo quedaría allí. Ni siquiera podrían sospechar de que veía a un psicomago porque las consultas eran en la casa del sanador, no en el hospital. Tendría que ser demasiado estúpido como para ir al hospital para tener las consultas donde todos pudieran verlo entrar a la oficina del psicomago.