Insecurity [Parte II]

Capítulo 116

"Descubrimientos desagradables, momentos agradables"

Al parecer, los problemas familiares lo perseguirían toda la vida.

—¿Para qué hace esto, profesor? 

—Te va a ayudar mucho, Harry.

El chico ladeó la cabeza, incómodo. Odiaba cuando no le daban la información completa. 

—¿Para qué? —probó Harry, dudoso de que fuera a recibir una respuesta.

Dumbledore pareció pensar si decirle o no la verdad, pero al final, habló.

—Para entender a Voldemort —dijo—. Pero la razón por la que lo necesitas no me corresponde a mí decírtelo.

Esta vez, él no cuestionó, porque sentía que lo entendía realmente. De hecho, estaba un poco impresionado de que le haya dicho aquello y no algo más críptico. 

Así, luego de ver los recuerdos de un hombre que trabajó en el ministerio y ver una casa que parecía deshabitada, donde en la puerta había una serpiente muerta colgada... Descubrió algo que realmente no le hacía ni pizca de gracia.

La familia materna de Voldemort eran los Gaunt... Esa misma familia con la que él estaba relacionado y no sabía quiénes eran hasta ese momento. 

Primero, sintió pánico, razón por la que se despidió del director con rapidez para salir y despejar su mente y ordenar sus pensamientos antes de tener algún tipo de ataque. Sorprendentemente le tomó menos tiempo del que creyó. En realidad, lo aceptó con relativa facilidad una vez lo pensó bien. 

Ya sabía que eran parientes de alguna forma u otra, después de todo, los dos eran descendientes de Salazar Slytherin, así que no debía sorprenderse tanto... Aunque sí le perturbó un poco la idea de que eran más cercanos de lo que pensó. 

Fue por eso que llegó directamente a su habitación, donde Theo lo esperaba para saber de qué había hablado con el profesor Dumbledore, pero Harry le pidió algo de tiempo antes de sacar primero un pergamino y recitar un hechizo bastante largo y, tras cortarse la palma de la mano, dejó caer unas gotas de sangre en el pergamino que poco a poco fue llenándose de manchas que tomaron forma de árbol, que luego se elevaron para tejerse en el aire y así Harry pudiera ver con mayor claridad el árbol genealógico que se había creado delante suyo. 

—¿Ese es el hechizo que usan los duendes en la prueba de sangre? —preguntó Theo, sorprendido—. Es distinto al hechizo que normalmente se usa para ver tu árbol genealógico. 

—No exactamente. Ellos ya tienen los pergaminos y las dagas hechizadas, no necesitan hacerlo cada vez que necesitas una prueba. Aunque es parecido —aceptó al final, comenzando a buscar.

—¿Cuándo lo aprendiste?

—Es la primera vez que lo uso. Lo encontré en uno de los diarios de Salazar Slytherin, pero nunca lo usé porque no estaba interesado, pero ahora... 

Siguiendo el hilo de su madre, no tardó demasiado en conectar con la única que tenía el apellido Gaunt en el nombre, y se sorprendió bastante al descubrir que aquella mujer (su bisabuela) era una squib. 

—Vaya...

—Espera, ¿no que estos nombres estaban tachados? No, espera... ¡ninguno de ellos marca si están muertos o vivos! —dijo Theo, fijándose en el árbol—. Pero los sangre-pura tienen un color distinto a los mestizos y esos... ¿son squibs?

—Este hechizo no sirve para ver eso, pero sí permite ver el árbol sin alteraciones, es decir, aquellos que fueron tachados de la familia aparecen también. Solo muestra los estatus de sangre... Mira, aquí, en la familia Black, hay algunos hijos que nunca fueron reconocidos por ser hijos bastardos —señaló antes de volver a lo que él estaba buscando.