Mario hermoso está cansado de que las mujeres lo utilicen. En su vida hace mucho tiempo que no hay sitio para el amor. Después de un matrimonio fallido, juró que jamás volvería a casarse y mucho menos entregarle su corazón a nadie. Aunque a la única...
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Acabo de bajarme ahora mismo del taxi. Me ha dado tiempo a llegar al partido. Tamara se reía de mí cuando la dejé en la puerta de su casa. Dice que estoy desesperada por ver a Mario, y es verdad. Hablé con él hace un rato cuando llegó al estadio y le dije que iría. Dice que aunque sea muy tarde quiere invitarme a cenar y luego me llevará él a casa. Tengo unas ganas enormes de verlo.
Voy hacia la puerta Vip del Metropolitano y enseño mi pase del club . Me cruzo con algunos trabajadores del Atlético y nos saludamos. Subo las escaleras que me llevan a la zona Vip y al llegar voy derechita al sitio que tengo asignado por trabajar aquí. Voy ya a sentarme cuando me encuentro a Clara la cual me saluda muy cariñosamente.
- Hola guapa, ¿cómo estás? -me pregunta muy contenta. En sus brazos lleva a su hija.
- Yo muy bien. ¿Y ésta cosita tan bonita? -le pregunto acariciando su mejilla
- Ésta es Alba. Saluda a María cariño -la niña me mira y me dice un tímido hola- anda, siéntate con nosotras que estamos solas
No puedo negarme. Clara me encanta. Me cae súper-bien. Nos sentamos juntas en su palco. Clara saca un cuaderno de dibujo y unos colores para dárselos a Alba y que no se aburra. Empezamos a hablar del trabajo y de la familia y Clara me cuenta que su padre murió cuando ella era pequeña y que su madre pasa bastante de ellos, que a su hija sólo la ha visto 4 veces mal contadas. Y que encima vive en Sevilla con su último novio. Sólo tiene una hermana que vive en Italia y tampoco la ve mucho. Los padres de Koke son algo mayores y no salen mucho del pueblo. Koke no tiene hermanos.Total, que aquí están solos los dos.
El partido comienza y sufrimos juntas. Está siendo difícil. Pero hoy Mario está muy sólido en defensa y no deja que el equipo rival se acerque ni un poco. Un gol de Saúl a 5 minutos del final, hace que la victoria sea nuestra. Clara y yo seguimos hablando un rato más en el palco y decidimos bajar a los vestuarios.
- Oye -me dice ella- a ver si te vienes una noche a cenar a casa
- Pues cuando quieras -le digo. Me apetece un montón quedar con ella y ampliar más mi círculo de amistades, que todos los amigos que tengo son merengues
- ¿Qué te parece el jueves? Como los chicos se van el viernes para jugar en Málaga el sábado, mejor ese día
- Ah, pues perfecto. Me apetece un montón cenar en tu casa
- Y a mí que vengas -me dice Clara muy sonriente
Llegamos a los vestuarios y nos quedamos en el descansillo esperando. Los jugadores empiezan a salir al poco rato. Koke y Mario salen juntos y yo cuando veo a Koke me pongo como un tomate pensando cuando el otro día nos vio dándonos el lote. Él me mira sonriendo y me saca la lengua burlón. Mario se me acerca y a mi ya me está entrando calor de verlo con esos vaqueros negros apretados y el jersey gris tan pegado .
