Maria no quiere verme. Quien puede reprochárselo. Me he portado como un cabrón con ella y es lo que merezco. Tengo un cúmulo de sentimientos dentro que me ahoga. ¿Como he podido decirle las cosas que le he dicho? ¿Como? Si no las pensaba, si no las sentía.
Soy un gilipollas, como ella bien me dice. He querido apartarla de mi lado para no hacerle daño. Y es lo que le he hecho. La he hecho sufrír. No puedo olvidar su mirada de dolor cuando le hablaba. Sus lágrimas surcando sus mejillas. Le he hecho tanto daño que no me lo voy a perdonar en la vida. Y encima me ha dicho que me quiere. Mi niña preciosa me ha dicho que me quiere. Y yo me he reído de sus sentimientos. Me he reído de ella.
Intento respirar con tranquilidad pero siento una opresión en el pecho cada vez que pienso lo que he hecho. Esto es lo peor que he hecho en la vida. Y encima a una persona que siempre me ha tratado bien y que me ha entregado su corazón desde el primer día sin pedir nada a cambio.
Hago lo que siempre me dice Maya, concentrarme en lo importante. Y ahora mismo es que María esté bien y que voy a ser padre. Joder. Estoy que no me lo creo. Y no puedo evitar sonreír. Es la única alegría que me he llevado hoy. Cuando nos lo ha dicho la doctora casi me da un ataque de la impresión. Claudia me agarró la mano con dulzura y lejos de estar enfadada me tranquilizó todo lo que pudo porque pensé que iba a desmayarme.
No tuve más remedio que contarles a sus padres que Maria y yo medio salíamos juntos. Claudia me miró fijamente y me dijo que en la vida podría haberse imaginado que su hija y yo tuviéramos algo. Y que bueno, que ahora teníamos que plantearnos lo que queríamos hacer porque hay una personita en camino que nos va a necesitar a los dos. Marco ha sido otra cosa. Me miró con dureza y ni me habló en todo el rato.
Tengo tantas cosas en la cabeza que sólo puedo ir al único sitio donde me siento seguro. Aparco el coche y me bajo de él muy nervioso. Respiro con rapidez y llamo a la puerta. A los pocos segundos me abre Maya mirándome sorprendida. Me acerco a ella y la abrazo bien fuerte. Me dejo envolver por sus brazos. Aquí es donde siempre me he sentido seguro, con ella y en esta casa.
- He metido la pata Tata - le digo a Maya con el mote cariñoso que le puse cuando vivía aquí - he hecho algo horrible
- Tranquilo cariño, tranquilo. Todo se arreglará. Todo
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No logro olvidarme de tu boca (Cross 5)
RomanceMario hermoso está cansado de que las mujeres lo utilicen. En su vida hace mucho tiempo que no hay sitio para el amor. Después de un matrimonio fallido, juró que jamás volvería a casarse y mucho menos entregarle su corazón a nadie. Aunque a la única...