Mario hermoso está cansado de que las mujeres lo utilicen. En su vida hace mucho tiempo que no hay sitio para el amor. Después de un matrimonio fallido, juró que jamás volvería a casarse y mucho menos entregarle su corazón a nadie. Aunque a la única...
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ERICA
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📅 Mediados de Noviembre
📍 Viernes
María salió de su despacho en dirección a la cafetería. Tenía muchísima hambre. Cuando saliera de trabajar iría a recoger a Tamara al instituto y se irían a Málaga para darle una sorpresa a su prima Erica. Por un lado, tenia muchas ganas de ir, pero por otro quería estar con Mario. Esta semana se habían visto muy poco porque él había tenido partido fuera y le habían puesto entrenamientos por la mañana y por la tarde. Se habían dado un par de besos escondidos en algún rincón de la Ciudad Deportiva. Pero lo que era estar juntos, no lo habían estado.
Entró en la cafetería mirando su móvil y se quedo parada. Allí en la barra, estaba Mario. Estaba inclinado hablando con la camarera, una rubia pechugona que le hacia ojitos. Le tocaba el brazo y él se reía. La furia recorrió el cuerpo de María por cada poro de su piel. Siguió andando y Koke le llamó la atención para que se sentara con él, con Jan y con Saúl. Se dirigió hacia allí y se sentó al lado de Koke sin perder de vista a Mario. Resoplo cuando vio como él se reía con algo que la camarera le había dicho.
- ¿Qué tal todo? -le preguntó Koke riéndose. Se había dado cuenta de la cara que tenía María mirando a su amigo
- Hasta hace 5 segundos muy bien. Ahora quiero asesinar a alguien -le dijo ella apartando su mirada del defensa rojiblanco
- Se te nota María -le dijo él susurrando
- ¿De verdad? -le dijo ella. Lo que menos quería era hacer una escena de celos en el trabajo. Koke la miró y asintió- ¡mierda!
Mario vino hasta ellos y cuando vio a María sonrió. Se sentó a su lado y le dio los buenos días. Ella le gruño y sacó su móvil para no tener que mirarlo. La camarera fue a su mesa para anotar lo que fueran a desayunar. Todos pidieron excepto María.