–Aún sigo sin entender por qué no podemos quedarnos en mi casa con una botella de vino y un bote de…
–Laura. Ya te lo he explicado demasiadas veces. Es el cumpleaños de la nieta de Mina.
Sonrió y cogiéndome del brazo, entramos en el patio donde esperaríamos a la protagonista de la noche.
Ya estaba toda mi familia, que clavaron su mirada en mí, en cuanto me vieron aparecer con esa mujer despampanante. Brad y Alma, mis padres, Dylan y su “novia”, los vecinos, María, que había ayudado a preparar toda la comida, quedaron en silencio.Carraspeé y colocando la mano en su espalda, le invité a sentarse en una de las sillas adornadas con flores.
Me fijé en que todo había quedado perfecto, claro que Alma sabía bien lo que se hacía y nadie podía igualarla en montar una fiesta de cumpleaños o lo que se la ocurriese.Localicé la barra libre, iba a necesitar unas cuantas copas, eso era de lo único que podía estar seguro.
–¿Cómo has conseguido preparar todo esto en tan poco tiempo?Alma se había acercado a saludarme, con el gesto torcido al ver a mi acompañante colgando literalmente de mi brazo.
La sonrisa, pegada con pegamento, de Laura, no colaba ante sus ojos, que tampoco se alegraba de verla.
–Ya sabes, cielo, no hay nada que yo no pueda o sepa hacer.
-¡Hola colega!Nos dimos dos palmadas en la espalda y tras los saludos a mi acompañante, nos sentamos.
–Disculpa, Lara ¿no?
–Laura, me llamo Laura.
–Sí, eso. ¿Podrías prestármelo? Solo será un minuto. Yo sola con esta barriga, no puedo cargar con todas las bebidas.
–Tráeme una copa de vino blanco afrutado, cariño.Me tocó el brazo con una sonrisa lujuriosa que hizo temblar el suelo y como toda respuesta a mi media sonrisa, Alma lanzó un bufido.
–"Tráeme una copa de vino blanco afrutado, cariño."La imitó con voz petulante sin importar quien pudiera escucharla.
–¿Pero qué narices crees que estás haciendo trayendo a esa… esa… esa… BRUJA aquí? ¡Es el cumpleaños de Rocío! ¿Qué pretendes?
–Tenía una cita con ella que no podía posponer y pensé…No me dejó terminar la frase, aun sabiendo lo que me molestaba que me cortasen.
–¿Pensaste? ¡No, tú no piensas querido! Estoy a punto de darte una patada donde más te duele.
–En tu estado no deberías alterarte.
–¡Deja mi puñetero estado tranquilito! Eres… eres… no quiero ni pensar en la palabra con la que te mereces ser nombrado en este momento.
–¿Qué importa a quien traiga?
–¡Uy primito las has hecho buena!Scott se estaba partiendo de risa el muy gilipollas.
–Tú, desaparece de mi vista, ahora.Ordeno y mando. Estaba a punto de llorar de la risa, pero me contuve.
–Eso, piérdete por ahí.Alma, se sirvió una copa de vino.
–No puedes beber alcohol.
-Pues dame un refresco o algo, porque esta noche, yo mato a alguien.Volvió a centrarse en mí en cuanto el calzonazos de su maridito desapareció junto a Scott.
–Pero vamos a ver. Entre vosotros hay algo, se huele a kilómetros a la redonda. Apesta a monos salidos que tira para atrás.
–¿Monos salidos?
–Sí. Me apuesto el brazo derecho a que no eres capaz de apartar las manazas de ella. Y no me mires como si estuviera loca porque os he pillado. Ponéis unos ojitos de corderos degollaos cuando pensáis que no os veis, que, me dan ganas de daros un mamporro a cada uno para que espabiléis y tú, cabeza hueca, no se te ocurre otra cosa que traer a la reina del pijerío y la arrogancia. ¡Anda que vaya dos!Clavó los ojos en dirección a Laura y su hermana Olga.
–Entre ellas no suman ni media neurona.
–¿Te recuerdo que Laura es médico y Olga enfermera?
–¡Por dios Leight, como si no supieras como han conseguido el puesto esas dos inútiles!
Por un lado tenía razón, lo que se comentaba por la clínica no eran simples rumores. No tenían muchas luces la verdad. Me reí a carcajada limpia. Alma era muy bruta diciendo las cosas pero siempre eran verdades. Eso no podía reprochárselo.
–Anda, prométeme que te comportarás con Laura.
–No pidas un imposible.
–Alma...
–Tu cabreo perpetuo no surte efecto en mí.Con esas, desapareció al lado de Brad.
...
–Has tardado mucho. ¿Te acuerdas de mi hermana Olga?
–Por supuesto. Buenas noches.La aludida soltó una risita infantil y entendí lo que me decía unos minutos antes Alma sobre las neuronas. Entregué la copa de vino blanco a mi acompañante y di un buen trago a mi whisky.
–Buenas noches Doctor Carrington.–Llámame Leighton.
–Leighton.Otra ráfaga de risitas.
–No tardaré, voy a saludar a mis padres.Laura hizo amago de seguirme pero una mirada le bastó para quedarse en el sitio.
–¡Hola cariño! ¿Qué tal estás?Mi madre me besó y pasó la mano por mi camisa, tratando de quitar alguna arruga invisible.
–Bien ¿y tú mom?
–Hijo.
–Padre.Casi me incitaba a cuadrarme ante él. Medimos fuerzas durante unos segundos, hasta que rompió el hielo como sólo él sabía hacer.
–Espero que esta noche no haya problemas.
–Puedes estar tranquilo.
–Cariño, ¿viniste acompañado? Preséntanosla.Mi madre, siempre había sido nuestro cortafuegos. Jamás permitiría que se formase otro escándalo como el de la última vez. Hoy no, aquí no.
–Es una amiga del trabajo. Nada especial.
–Si le has traído, será por algo.Sin dar tiempo a mi reacción, se plantó frente a Laura. Llevábamos allí cinco minutos y ya me parecía una eternidad.
–Hola querida, soy la madre de Leighton, Adele Carrington. Un placer.
–Igualmente señora Carrington, soy Laura. La…
–Compañera de trabajo de mi hijo. Ya me ha puesto al día. Pero llámame Adele.Laura torció el gesto y se puso colorada, al parecer no le emocionó que mi madre le reconociese como lo que era, una simple compañera.
Podía dejar perfectamente en el tintero los demás adjetivos, amante, ambiciosa, podría decirse que era lo más parecida a una amiga, insaciable, calculadora y un largo etcétera que se me ocurría con sólo mirarla.
–Disfruta de la fiesta querida. Cariño, luego te veo.
Me besó aprovechando para advertirme que teníamos que hablar y se marchó al lado de mi padre quien no se había acercado, pero que no apartaba la vista de nosotros, mientras bebía de su whisky. Al parecer nuestros gustos, con la bebida, eran similares.
–Leight, cariño, no me encuentro muy bien. ¿Podrías indicarme dónde está el aseo, por favor?
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Pero tú... ¿Qué te crees? (Completa)
RomantizmVideo trailer en el primer capítulo. Creado por @Ainebooks que es una artistaza creando y escribiendo. Mil gracias ❤️ Rocío viaja a Asturias para reencontrarse con su abuela, pero también con su pasado, que marcará el presente y reescribirá su futur...