Trust me (Larry Mpreg)

52

Cinco meses después.

-Teo amor déjala que está dormida.- Pidió Harry cuando entro y lo vio mirando a Alai dormir en la cuna.

-Pero quiero jubar con Peppa.- Contesto haciendo puchero y Harry rodo los ojos.

-Cuando se despierte juegan.- Dijo tomándolo en brazos.- ¿Me ayudas a cocinar antes de que venga Lou?-

-Bueno.- Suspiro rendido y escondió la cara en el cuello del mayor.

Harry le beso la mejilla con ternura y le dio un último vistazo a su bebe dormida antes de cerrar la puerta despacio y caminar con su cuñadito a la cocina. Cuando llego lo sentó en la mesada y hablo.

-¿Hacemos galletitas o una torta?- Le pegunto después de darle un besito en la nariz que lo hizo reír.

-Allititas.- Respondió y Harry rio.

Teo ya había cumplido sus cuatro años. Dos meses atrás había empezado el jardín al que iba por las mañanas, a excepción de esta ya que Flor los llamo la tarde anterior diciendo que Teo quería verlos y no quería ir al jardín, cosa a la cual Harry y Louis no pudieron negarse.
Habían pasado a buscarlo unas horas antes de cenar, cuando llegaron cenaron los cuatro juntos y luego vieron una película acurrucados en el sillón. Teo se había enojado cuando su prima se durmió y lo privo de jugar juntos.

Había hecho una especie de berrinche que los mayores pudieron calmar enseguida, que termino con los cuatro durmiendo en la cama matrimonial.
Por la mañana el rubio se había despertado cuando Louis salió de la cama para vestirse e ir a trabajar. Louis había volteado a verlo encontrándose con su hermanito haciendo puchero, por lo cual lo tomo en brazos y lo meció hasta que parpadeo pesado indicando que estaba volviendo a dormir. Despertó suavemente a su esposo y después de darle un beso y decirle que ya se iba le dejo a Teo encima dejando que se acurruquen y vuelvan a dormir.
Ahora faltaba una hora para que Louis vuelva a casa y había avisado que llevaba comida de mc Donald cosa que hizo a Harry suspirar de alivio ya que no tenía ganas de preparar el almuerzo. Pero cuando el mayor vio a Teo inquieto por no poder jugar con su prima se ofreció a cocinar juntos.
Así que ahora se encontraban en la cocina, Harry con las manos enchastradas y Teo lleno de harina riendo de su tío.

-Deja de reírte que te meto al horno como a las galletitas.- Amenazo Harry haciéndose el serio y Teo rio más fuerte.

-Hady sucio.- Dijo el rubio carcajeándose. Aun no pronunciaba la doble r, cosa que lo hacía verse más tierno.

-Vos también estas sucio.- Contesto el mayor y Teo se miró notando la harina en él.

Cuando vio las manchas blancas en su ropa y manos miro a Harry haciendo un puchero y este entendió que iba a llorar. Teo odiaba estar sucio.

El mayor enseguida tomo un repasador para sacar el resto de masa de sus propias manos y cuando estas estuvieron limpias tomo a su cuñadito en brazos dejando que se acomode en su pecho.

-Ahora viene Lou y nos bañamos ¿Te parece?- Pregunto y Teo asintió.

-No quiedo sucio.- Harry sonrió y le beso la mejilla.

-Ya se mi amor.- Contesto con ternura.

Después de comprobar que aún faltaba tiempo para sacar las galletitas y de ver por el babycall que Alai seguía dormida, camino al sillón y se sentó aun con Teo escondido en su pecho.
Lo acomodo dejando que se acueste en sus piernas y llevo la mano que no lo sostenía a la pequeña nariz de botón. La acaricio con la yema de sus dedos viendo como cedía al sueño con el entrecejo fruncido y un puchero en sus labios.
Sonrió de manera inconsciente cuando la puerta de entrada se abrió y alzo la mirada para encontrarse a su novio caminando hacia él.

-Hola amor.- Saludo Louis bajito al ver a su hermano dormido.

-Hola.- Contesto Harry sonriendo enamorado.

-¿Cocinaron?- Pregunto Louis con una sonrisa burlona y Harry rodo los ojos.

-Te hicimos galletitas.- Respondió y Louis le dio un besito.

-¿Mi hija?- Pregunto y el mayor alzo una ceja.

-No es tuya.- Respondió serio y esta vez el menor rodo los ojos.

-Nuestra.- Contesto y Harry sonrió victorioso.- ¿Está dormida?-

-Sí, desde hace un rato igual.- Hablo señalando el aparato en la mesita.- Despertala así comemos, yo voy a bañarlo rápido que ya se estaba quejando.- Dijo ahora mirando a Teo.

-Que pesado.- Contesto Louis refiriéndose a su hermanito.

-No seas malo pobre gordo.- Dijo el mayor y beso la frente del pequeño en sus brazos.

-Bueno voy a buscar a mi chancho.- Informo Louis caminando a la habitación de Alai.

Harry sonrió al verlo alejarse y volvió la vista a Teo. Le corrió el pelo de la cara y le hablo.

-Teo amor.- Dijo moviéndolo despacio.- Despertate bicho así nos bañamos.- Agrego y Teo parpadeo.

-Sucio.- Se quejó con un puchero y Harry sonrió.

-Ya se bebe, vamos dale.- Se paró con un Teo ya despierto y camino al baño.

Quince minutos después un recién bañado y perfumado Teo corrió a los brazos de Louis quien los esperaba en la mesa con Alai despierta en su pecho.

-¡Louu!- Grito el pequeño emocionado y Louis rio.

-Hola monstruo horrible.- Lo saludo besándole las mejillas ruidosamente.

-No soy hodible.- Respondió ofendido.

-No, sos hermoso.- Interrumpió Harry y Teo sonrió.- Sentate en tu silla así comemos dale.-

El rubio hizo caso y se sentó en la silla a un lado de Harry. Una vez que todos tomaron asiento empezaron a comer. El mayor tomo la mamadera y pidió a Alai de los brazos de su novio quien enseguida se la paso. La acomodo en sus piernas y comenzó a alimentarla mientras le hablaba ya que ella lo miraba fijamente con sus enormes ojos, ahora azules.

-¿Queres que después vayamos a la plaza gordo?- Le pregunto Louis a su hermano y este asintió feliz.

-¡Sii!- Respondió emocionado.- Pero no Peppa.- Dijo esta vez serio.

-Alai amor.- Dijo Harry rodando los ojos.- ¿Y qué pasa con ella? ¿No qué?-

-Peppa a la plaza no.- Louis y Harry se miraron entre sí.

-¿No queres que vaya?- Teo negó.- ¿Por qué?- Pregunto el mayor confundido.

-Polque cuando Peppa no me quieden.- Respondió haciendo puchero.

-¿Cómo no te vamos a querer mi amor?- Pregunto Louis mientras lo pasaba a su regazo.- Nosotros te amamos mucho gordo.- Dijo y le beso las mejillas.

-Yo tamien.- Respondió dándole un besito a Louis.

-¿Entonces terminamos de comer y vamos a la plaza?- Pregunto Harry.

-Bueno.- Respondió Teo jugando con las manos de Louis.

Los mayores compartieron una mirada de confusión pero dejaron el tema ahí y se concentraron en terminar de comer y alimentar a los más chiquitos.