Capitulo 19.

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Harry POV.

Estuvimos horas. Horas tras horas. Minutos tras minutos. Segundos tras segundos. Cada uno de ellos haciéndose mas eterno que el anterior.

Alex e Irene hablaban en bajito entre ellas. Pero su irritante susurro me ponía de los nervios. Mierda, estoy seguro que ellas sabían lo que estaba pasando.

El sonido de mis zapatos rebotando en el suelo era lo otro que se oía. Podía notar el nerviosismo corriendo por las venas de Niall.

—Tio, ¿por qué no paras?—dice Louis, que ya llevaba un rato llorando.

—Gracias—dice Niall, al fin, harto.

—Comedme los huevos—les digo a los dos.

—¿Que dices tu, marica?—Louis se levanta firme para detenerme la reacción ante el comentario de Horan.

—¿Quien te crees, rubio de mierda?—le digo con asco. Mi furia es notable por todos los sentidos y no puedo controlarla. Si no la saco ahora mismo podría tirar la puerta que me separa de mi novia.

—¡Harry! Vete fuera, ¿vale? Toma un poco de aire fresco, te vendrá bien—sugiere Irene. Me mira como "Ya, hazlo".

Salgo echando humo a fuera. Enciendo un cigarro y dejo que mis músculos se relajen, tomando aire despacio. Miré al cielo y una lágrima cayó por mi mejilla.

Soy inconsciente y no pienso las cosas. Pero no soy tonto. Se porque Bobbie rompió conmigo y no estoy dispuesto a aceptarlo. Y se que tenia algo que ver con lo que esta pasando en esa sala de hospital.

Y no, claramente no estoy preparado para eso.

Fue un cigarro tras otro. Y fueron una hora tras otra. No me moví de mi posición pese a que ya hacía frio para mi manga corta y pese a que mucha gente me mirase raro.

Entonces Alex apareció y se sentó a mi lado. El corazón me iba dando tumbos.

Tenían la respuesta e iba a ser escuchada.

—No estoy preparado para esto.

—Lo siento tantísimo, Harry. Ella intentó evitarte esto. Pero las cosas son así.

Admiro la firmeza de Alex para hablar de este jodido tema. Sabiendo que es su mejor amiga.

—Bobbie tiene leucemia desde antes de conocerte. Hará año y medio o así. El tratamiento estaba dando efecto. Pensábamos que se iba a curar...

Intenté susurrar algo, atragantándome con las letras. Pero naza salió de mi más que lágrimas tras lágrimas.

—Fue en casa de Liam cuando todo empezó a ir mal. El tratamiento dejó de dar efecto. La dieron unos tres o cuatro meses.

—Lo que viene siendo ya.

Si antes sentía dolor, lo de ahora es peor que morir ahogado. Me dolía tanto el pecho que pensé que iba a explotar. Tiré el cigarrillo al suelo y lo aplasté furioso. Pensé que una terrible reacción iba a salir de mi y que podía partir el cuello a Alexandra. Pero un enorme vacío se apoderó de mí y la tristeza me invadió.

Miré a Alex, echándome a llorar sobre mis manos, pero sin quitar el contacto con sus ojos. Vi la tristeza en su mirada, procurando no llorar.

—Matame ahora, por favor—suplico.—Matame, dolerá mucho menos que esto.

Ella negó, mirando al cielo.

No. No. Me negaba. Me negaba a perderla. No puedo estar toda mi vida sin Bobbie. No puedo. No puedo imaginar pasar años y años sin ella, porque mas que nada ella le da sentido a todo.

El era fuerte.

Ella podía salir de esta.

—Alex, por favor...No puede ser verdad—lloriqueé.—No puedo vivir sin ella.

—Yo tampoco—susurra.

—Matame, te lo suplico —lloriqueé como un maricón.—Hazlo, joder.

Mi chillido la asustó, pero no se detuvo en su intento de venir a abrazarme. Me dejé caer sobre mis rodillas al frío suelo. Que importaba. Nada importaba. No podía asimilar lo que acababa de oír. Si ella muere pienso suicidarme. Pienso hacerlo de verdad. Sin Bobbie yo no soy nada.

—Duele...Duele tanto, joder—lloré en su hombro. Apreté su camiseta entre mis puños y absorbí todo su olor.

—Te necesita ahora, Harry. Aun que no lo sepa, lo hace.

Negué, simplemente no podía con aquello. Apreté mi cabeza, soltando un chillido de dolor. Las venas se me hincharon y la sangre pasaba con dificultad. Y notaba como los colores se subían a mis mofletes. No, joder, ¿por qué?

—¿Por qué a mi?—pregunté, dando un golpetazo contra el suelo con el puño. Dolía tanto como si me hubiera partido un dedo, pero ni se compesaba con todo lo que pasaba en mi interior. Me empezó a brotar sangre de los nudillos.

—Basta, Harry—Alex se puso de cuclillas y me tocó el brazo.—Para, por favor.

Pero volví a golpear al suelo, chillando de dolor. Me desplomé en el suelo, mirando al cielo. Cerré los ojos y lloré. Imaginando el funeral, su cuerpo sin vida, el primer momento en que la viera y no sabría que decir.

Lloré y lloré sin consuelo alguno. Porque por primera vez en mi vida sabía lo que era sufrir. Y lo estaba viviendo en sangre y hueso.

**

Llevo siglos sin subir seguido, sin poneros cosas al final del capitulo y algunas dejarán de leer esta novela después de esto.

A lo primero, lo siento. Exámenes y otros temas, no me han dejado subir capitulo. Prometo intentar subir mas a menudo.

A lo segundo: lo siento también, pero no soy de esas típicas escritoras que matan a uno de los protagonistas en el último capitulo. Si vais a dejar de leer, me parece genial, muchas lo harán. Pero a las que se queden, no los desfraudaré, lo prometo. No Quiero adelantar nada, pero esta novela no os defraudara y el final os encantará.

Gracias a todas las que comentan, leen y me apoyan, de verdad. Sois lo mejor que hay.❤❤❤

Las jugadas de la casualidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora