Capitulo 2. Creo que te quiero.

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Bobbie POV.

Harry descansaba su cabeza en mis muslos y yo jugaba con sus rizos.

¿Quien diría hace un año que íbamos a estar así?

¿Quien diría que yo me iba a enamorar, y más del "mujeriego" de Harry Styles?

Nadie se lo esperaba, todos decían que lo nuestro no funcionaría, incluso nuestros amigos nos dijeron que nos olvidáramos mutuamente. Pero Harry y yo sabíamos que eso no era el final y que podíamos luchar por nuestra relación.

Y aquí estamos.

Alex vino con unas gafas de sol grandes y un vestido negro ajustado a su cuerpo mas delgado que de costumbre. Se subió las gafas a la cabeza y me mostró una revista de cotilleos.

—Soy feliz, amo las revistas de cotilleos—me dice. Yo ruedo los ojos y ella ríe. —Bueno, desde que salgo yo en ellas.

Harry se despierta al oirnos hablar y se agarra de una forma rara a mi cintura.

—Bebé, estoy de ese humor—me susurra con una voz ronca.

"Estoy de ese humor" es una cosa entre nosotros. Un día que yo tenia muchas ganas, y Harry sólo veía el fútbol, no sabia que hacer para llamar su atención. Ni el vestido mas sexy del mundo ni nada de eso le ponía. Por lo que al final le terminé diciendo "Harry, estoy de ese humor". Y resulta que él también quería, pero no se atrevía a decirlo por no ser pesado. Y desde entonces nos referimos así a eso.

—Cariño, es pronto. Hace calor y estoy cansada—le digo acariciándole el pelo.—Mas tarde. Esta noche.

Puso un puchero. Alex se indicó a la boca con dos dedos poniendo cara de arcada como «Vomito».

—Bueno—dijo mi amiga—Aqui estoy. Mirad que vestido más mono.

Harry y yo la miramos como salía en la revista con un vestido rosa palo con algo de vuelo y sonriente.

—Alexandra—tosió.—Alexandra su puta madre.

Nosotros reímos y ella continuó indignada.

—Alexandra Green ha dejado la radio de Fire FM por motivos desconocidos. Se rumorea que quería hacer su carrera en solitario sin contar con...un gilipollas de mierda—dice en lugar de lo se supongo que sería 'Zayn Malik'.—Por eso ha abierto su nueva radio que promete mucho y ya tiene un montón de oyentes. ¿Será Alex la nueva súper estrella de la radio?

Me miró con una sonrisa satisfactoria y yo reí.

—Guao—dice Harry. Yo le acarició el pelo de nuevo, perdiéndome en sus rizos. Le empujé de la cabeza y le tiré del sofá.—Eh, Boo, ¿qué coño haces?

—Me dabas calor.

Me levanté mirándole coqueta y caminé meneando mis cabezas. Subí a la habitación y oí sus pasos detrás mío. Corrí encerrándome en la habitación y saltando a la cama. Él la abrió y se quitó la camiseta así sin más.

—¿Tienes calor? Por qué vamos, voy a asfisiarte.

Se subió encima de la cama y por mucho que luché contra mi voluntad, sus besos se perdieron en mi cuello dejándome sin aliento para pelear. 

Me quitó la camiseta y repartió besos por mis pechos hasta bajar y quitarme los pantalones cortos.

—¿No decías que no tenías ganas?—preguntó juguetón, apoyando su barbilla en mi vientre. Yo rodé los ojos y le acaricié el pelo. Oh dios, me estoy dando cuenta de lo mucho que amo su pelo.

Las jugadas de la casualidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora