Capitulo 26.

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MIERCOLES~

BOBBIE POV.

-Niall, ¿tu donde estudias?-Preguntó Irene.

-Shh...No chilles por favor.-La suplico Louis mientras yo le servía la taza de café caliente recién hecho.-Gracias.-Susurró dedicándome un sonrisa.

-Estoy en la universidad que hace esquina en la calle Santiago.-Explica el rubio. Se aprieta la frente mientras frunce el ceño.-Bobbie, ¿tienes un paracetamol? Tengo la cabeza como un bombo.

-Normal, ¿Asi como vas a aprovechar hoy el día?-Le regaño. El me mira sonriendome de lado. Que guapo que es. Abrí un armario y saque las pastillas, dándole una.

-Gracias.-Susurra.

-Boo, ¿tienes un puto rímel?-Me pregunta Alex. Yo asiento y salgo de la cocina para acompañarla. Se lo entregué y nos maquillamos juntas. A los dos minutos o asi, llamaron a la puerta.

-Pasa.-Grito Alex.

Niall asomó su cabeza por el espacio que había entre el marco y la puerta.

-¿Nos dejas solos...un minuto?-Le pregunta a mi amiga. Alex asiente y deja su maquillaje en el mármol. Sale y deja que Niall entre. El chico no cierra la puerta, tan solo la corre.

Mi interior se revuelve al sentir que estamos así solos y que quiere hablar conmigo. No se, estoy nerviosa. Pero a la vez me gustan estos nervios. No se acercó mucho a mi, se le notaba tímido.

-Lo siento.-Susurró. Yo le mire extrañada, ¿porque pide perdón?

-¿Que dices, Niall?-Le digo graciosa.

-No debí haber bebido tanto... menuda escenita te montamos en el hospital. Y me tienes que aguantar diciendo bobadas y acogerme en tu casa. Soy un desastre.-Miró al suelo arrepentido y yo le levanté la cabeza con mi frágil mano y nos miramos, mas cerca de lo que deberíamos estar. Otra vez ese revoloteo interior.

-Ey, fue gracioso. No debes pedirme perdón por eso.-Le dije sonriente.

-No soy así, no quiero que me juzgues mal.

-No lo haré. Hagamos como que no haya pasado nada.

-Esta bien.-Me sonrió débilmente y salimos del cuarto de baño.

Entre todos habíamos recogido el salón y la cocina, era hora de marcharnos a clase. Cogimos el bus y llegamos a la universidad. Niall se quedo en el bus que le llevaría a la suya.

Los cuatro subimos las escaleras sin mucho ímpetu. Malditos miércoles. ¿Que son los miércoles en la semana? Son el puto medio. Son un incordio. Sin miércoles todo seria mejor.

Vi a Paula que estaba rellenando una botella en uno de los baños. Dejé a mis amigas con Louis y fui junto a ella. Me sentía rara, como si yo en parte tuviera algo de culpa.

-Hola.

-Hola, Bobbie.-Me saludo ni muy borde ni muy simpática. Y ella siempre esta sonriendo.

-¿Como fue todo ayer? Te debo un favor...

-Le llevé en coche, intento arreglarlo pero no pudo. Estaba ebrio y me confesó que te lo contó a ti todo... No te hagas la tonta.-Cerro el grifo y me miró directamente a los ojos, esperando una respuesta que mi interior no pensaba soltar.

-Yo...No...No he hecho nada con él.-Bien Boo, bien. Eso es justo lo que se dice cuando has puesto los cuernos a una amiga tuya con su novio. ¿No es asi?

-¡Eso lo se de sobra!-Dice ya más animada.-Bobbie, tu nunca me harías eso. Ni aun que fuera una puta, eso no lo harías.

-Claro que no.-La afirme segura.

Las jugadas de la casualidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora