Las jugadas de la casualidad.

"Oye, fea" Segunda temporada de Las Jugadas de la Casualidad

Bobbie POV.

Besé cálidamente los labios de Niall. Él a penas los movió, sorprendido. Era tan dulce y suave como siempre. Me separé y le sonreí. Apoyó sus manos en mi cintura y me llevó en volandas hasta que mi espalda tocó un árbol. El beso se fue incrementando mientras yo cogía sus mechones rubios entre mis dedos.

-¡Eh, Horan! ¿No piensas compartir un poco o qué pasa?-Liam nos miraba desde la puerta de casa con una sonrisa. Corrí, sin importarme en absoluto la presencia de Niall y le besé, enredando mis piernas en su cintura.

-Te he echado de menos, nena-susurró en mis labios mientras nos besábamos.

-¡Bobbie!-la voz de Harry me alteró el corazón. Estaba detrás mío, llorando.-¿Qué éstas haciendo?

Los tres se juntaron en una fila y me miraron expectantes. Me sentía sucia, poniendo los cuernos a mi novio con dos de sus mejores amigos.

-Yo...-susurré-No se lo que quiero. No se a quién elegir. Harry, yo te quiero...-él se giró enfadado mientras los otros dos me miraban sin saber que decir.-¡Harry! ¡Espera! ¡No te vayas! ¡Harry, por favor!

Alguien me agitó el cuerpo y abrí los ojos, llorosos. Me quité el sudor de la frente mientras Harry apareció frente a mi, preocupado. Me acarició la cara observando como mi cuerpo se iba calmando.

-Ey, nena, ¿qué soñabas?-yo negué con la cabeza asustada. Llevaba soñando ese estúpido sueño sin fundamento día tras día. -Gritabas mi nombre sin parar. ¿No estarías teniendo un sueño erótico conmigo, no?-su sonrisa juguetona se extendió por su rostro y yo reí empujándole. Me deshice de las sábanas que tanto calor me daban y le besé tierna.

Él apoyó su frente contra la mía, empujandome hacía un lado, de forma que quedé encima de él, mientras posaba sus finas manos en mi espalda baja.

-Siento haberte despertado así -me disculpé. Él sonrió y me besó, diciendo que no pasaba nada.

-¿Qué era lo que soñabas?

-Que te ponía los cuernos, y tu te enfadabas. Era horrible, Harry. Te lo juro que me quedaba sin aire y tu sólo te ibas y no conseguía alcanzarte.

-Deberias dejar de atormentarte con eso, cariño. Yo lo he superado, tu deberías hacer lo mismo-besó mi hombro y sonreí, pero aun no estaba convencida. Harry y llevábamos ya semanas juntos desde que volvimos a vernos. Estamos viviendo juntos. Alex siempre viene a vernos con Liam y Louis. Al único al que no se le ve es a Zayn, que cuando su voz se oye en la radio, Alexandra se pone a chillar como una posesa hasta que cambiamos de canal.

Harry y yo nos cambiamos y fuimos a casa de Louis, con la esperanza de que Irene esté de buen humor.

Llamamos al timbre, de la mano.

-¿No hace demasiado calor?

-Me estoy muriendo-le contesté abanicandome con la mano. Louis fue el que abrió la puerta. Se asombró al vernos.

-No es el día perfecto, ¿estais seguros de que queréis entrar?-preguntó susurrando para que Irene no se de cuenta. Yo asentí y Harry hizo lo mismo. Pasamos y le di un beso a Louis en la mejilla.

Fue muy gracioso el como hicimos las paces. Creía que Tomlinson estaría muy enfadado conmigo por no haberle consolado ni cogido las llamadas. Cuando me le encontré de frente fue muy raro. Quería abrazarle, pero le debía explicaciones.

-Louis, por dios. Como me alegro de verte. Lo siento tantísimo, solo quería alejarme de todo esto y por eso no te respondí, no sabía que Irene y tu lo habíais dejado. Soy la peor mejor amiga que existe pe-.