Relatos sobre Kirito y Asuna

Ceremonia del té

Kazuto y Asuna se encontraban en estos momentos en uno de los restaurantes más de moda de la vida tokiense. Esperaban a Kyouko, la madre de Asuna, quien no terminaba de ver con buenos ojos la relación de su hija con ese muchacho. Habían quedado con ella para que se conocieran más y contarle unas cuantas novedades que habían surgido en la pareja en los últimos días. 

Asuna y Kazu tenían veintiocho y veintisiete años respectivamente y se habían conocido hacía seis años en una de las reuniones que RECT, la empresa del padre de Asuna y la cual ella dirigía, y RATH, donde trabajaba Kazuto. Desde ese momento empezaron a hablar y verse y, al cabo de unos meses, comenzaron a salir y a tener una relación formal.

- ¿Estás nervioso? - preguntó la castaña riéndose ya que su novio no dejaba de mover las piernas por debajo de la mesa.

- Tú dirás - sonrió - llevamos juntos seis años y tu madre sigue sin verme como tu novio. Seguro que el viaje a Kyoto de este fin de semana está pensado para buscarte un marido.

- Mira que eres mal pensado - rió - te he dicho muchas veces que es porque me van a enseñar a oficiar la ceremonia del té.

- Esa es la excusa, te lo aseguro - dijo con total seguridad - la realidad es presentarte a otro pretendiente. 

- Paranoico - volvió a reír la castaña. 

Mientras la pareja reía, algo que a Kazuto le hacía relajarse, llegó la temida madre de Asuna, que no traía cara de buenos amigos.

- Ya podríais haber elegido otro restaurante - fue lo primero que dijo - aunque sea un local de moda tanta modernidad a mí no me gusta - ambos asintieron y se pusieron algo más serios. Una camarera vino a tomarles nota y, cuando tuvieron todo sobre la mesa, la madre de Asuna miró a ambos - vosotros diréis a qué se debe esto. 

- Verás... - comenzó Asuna mientras cogía la mano de su esposo por debajo de la mesa - es que... 

- Espero que no sea que estás embarazada o que os vais a casar porque no es el momento.

- La verdad - dijo algo más segura la castaña - es que venía a decirte que nos hemos casado en secreto hace una semana - terminó hablando de malas maneras - solo lo sabían Kou, Klein y Liz porque fueron nuestros testigos. Quería decírtelo a ti primero para informarte que Kazu también vendrá a Kyoto conmigo a la ceremonia del té.

La madre de Asuna comenzó a montar una escena a la cual estaban acostumbrada la pareja, dicha escena terminó en una discusión madre e hija con Asuna recriminándole que ella y el azabache llevaban juntos seis años y que son dos personas adultas para decidir acerca de su vida. Dicha discusión finalizó con la madre de la castaña marchándose del restaurante y la pareja siendo el centro de atención de los comensales.

- Lo de decirle que estás embarazada mejor lo dejamos para otro día, ¿no? - preguntó Kazuto sonriendo.

- Sí, creo que es lo mejor - rió la castaña, que pagó y se marcharon. 

Flashback

Ambos jóvenes se habían ido de vacaciones a una paradisíaca playa en el otro lado del mundo. Querían estar desconectados de las oficinas, empresas y demás por lo que decidieron irse a la otra punta del mundo para estar completamente solos y juntos. También fue la excusa perfecta para que Kazuto se declarara y le pidiera matrimonio.

Aprovecharon ese tiempo como si fuera oro en paño y se estuviera acabando el mundo ya que los dos eran conscientes de los problemas a los que se enfrentaban cuando volvieran a Tokio. 

- ¿Qué haces? - preguntó Asuna pícaramente mientras ambos estaban tumbados en la hamaca en medio de la playa. 

- Leo - respondió Kazuto haciéndose el tonto pues sabía lo que Asuna quería - y escucho el mar de fondo.