DJ got us fallin' in love

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Kirito y Asuna eran dos adolescentes que, aunque convivían en la misma ciudad, Kyoto, no podían ser más diferentes. Mientras Kirito se había criado en una familia humilde, Asuna era todo lo opuesto, era la heredera de la riqueza más importante del país.

A pesar de que ambos jóvenes eran de dos mundos distintos e incluso tenían diferentes edades, la castaña era un año más mayor que el muchacho, ambos se conocían pues Eugeo, el mejor amigo de Kirito, era, a su vez, íntimo amigo de Asuna desde pequeños ya que la familia Yuuki y la familia del rubio estaban muy unidas debido a que compartían negocios.

Aunque no quisieran decirlo, Asuna y Kirito habían mantenido una relación amorosa hacía un par de años. Ambos se conocieron porque Eugeo iba a salir de fiesta con Kirito y más amigos e invitó a Asuna y a sus amigas a unirse, la castaña aceptó dado que su mejor amiga, Sinon, estaban empezando una relación. Esa noche la castaña y el azabache se conocieron y quedaron prendados el uno del otro, bailaron durante todo lo que duró la noche y, antes de marcharse, se besaron e intercambiaron los teléfonos. Tras esa noche ambos quedaron durante varios días, incluso meses, iniciando una relación secreta pues los dos sabían que lo suyo era imposible a causa de los orígenes tan diferentes que tenían. A pesar de que Asuna llevó esa relación de una manera muy reservada, acabó saliendo a la luz, lo que provocó que sus padres tuvieran que recordarle los orígenes que ella tenía y los que tenía Kirito, por lo que el triunfo de ese incipiente amor, no iba a llegar nunca a buen puerto dado que, a causa de la mentalidad cerrada de la ciudad en la que vivían, no iba a ser aceptada. La castaña, consciente de ello, quedó con el azabache en el parque donde se veían a escondidas. Cuando él llegó le negó el beso y procedió a hablar.

- Hemos terminado - le dijo sin querer mirarlo a los ojos - los dos sabemos que lo nuestro no va a poder ser nunca, tú eres humilde y yo soy la heredera de los bancos más importantes del país. Mis padres me han buscado varios pretendientes y este fin de semana se reunirán conmigo para decidir con cual me casan. En dos años seré mayor de edad y se anunciará el compromiso para casarnos unos meses después. Sé que te he hecho perder el tiempo y que pensarás que he jugado con tus sentimientos pero no es así - el moreno se secó una lágrima pues durante esos meses él se había enamorado perdidamente de ella - lo que tú sentías por mí era muy correspondido por mí pero las circunstancias y las situaciones son las que son. Ojalá pudiéramos huir a Tokio para poder vivir esto libremente pero no podemos - tuvo que hacer una pausa para secarse las lágrimas - me encantaría poder seguir con esta relación pero es imposible porque sé cómo es mi familia y buscarían la manera de arruinarte la vida para que te alejes de mí por lo que creo que esta es la mejor solución para ambos. Sé feliz y gracias por estos cuatro meses que me has hecho pasar, creo que nunca he sido tan feliz ni he sonreído tanto.

- Pero... - habló él una vez ella comenzó a darse la vuelta para marcharse - yo... te quiero. Estoy enamorado de ti. ¿Cómo se supone que tengo que olvidarte? Te veo constantemente, aunque no vayamos al mismo instituto, eres la mejor amiga de mi mejor amigo, el cual está saliendo con tu mejor amiga. No me dejes, sigamos juntos.

- Es imposible - negó con la cabeza - por favor, no lo hagas más difícil - sollozó - no te preocupes porque no me verás más, hablaré con Eugeo y con Sinon. Les explicaré la situación y seguro que lo entenderán. Es por tu bien, créeme - y, sin más, le dio un beso en la mejilla y se marchó. Como dijo, la castaña habló con ambos amigos y, aunque no estaban de acuerdo en absoluto con la decisión, no les quedó más remedio que aceptarlo. Tras la ruptura, Asuna se centró en sus estudios, en graduarse y en comenzar la carrera universitaria. También iba a eventos con el chico que habían elegido para ella, el cual era un chico italiano cuya familia era propietaria de una de las marcas de coches más importantes del país.

Pasaron dos años desde aquella ruptura, la cual fue muy difícil para los dos y ninguno había superado. Kirito también se centró en su vida estudiantil, Eugeo le animó para que se hiciera un hombre de negocios importante. El rubio quería que su mejor amigo fuera su socio para que la empresa de su familia prosperara más, Eugeo sabía que Kirito era la persona que su empresa necesitaba para despuntar y hacerse un espacio en el panorama nacional, no solo en Kyoto. Para poder pagarse los estudios, Kirito había entrado a trabajar como camarero para una empresa que organizaba caterings y eventos privados, a la cual había entrado gracias a su mejor amigo.

Relatos sobre Kirito y AsunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora