En tonos grises (ChengSang)

Extra 3. El pequeño pavorreal

Jin Zixuan se despertó como los otros días. Su esposa no estaba en la cama, escuchaba el ruido en la cocina, donde probablemente estaría preparando el desayuno para la familia y el lonche de su hijo.

Habían adoptado al pequeño tímido. Jin Zizhen había mostrado su verdadera cara y ahora era un niño con una imaginación asombrosa. Les escribía cuentos extraños y le encantaba ver las películas de Disney, sobre todo con su papá Zixuan, porque le dejaba verlas mientras comían dulces y papitas.

Pensó entonces que esos días le habían cobrado factura. Llevaba alrededor de una semana sintiéndose del asco. Siempre se levantaba y salía a correr para mantener su corazón sano, después llegaba a casa y ayudaba a su esposa a preparar el desayuno, pero ahora no quería ni levantarse.

Y se hubiese quedado en la cama otros cinco minutos, de no ser por las molestas nauseas que le invadieron, como en los días pasados. Se levantó apresurado de la cama y fue a descargar lo poco, casi nada, que había en su estómago.

Escuchó pasos subiendo a la recamara y luego la voz de su esposa llamarle desde la entrada.

- ¿A-Xuan, estás bien? – asintió con la cabeza, sintiéndose un poco mareado – A-Xuan, llevas días así, debes ir al médico –

- A-Li, estoy bien – se levantó y lavó sus manos y su cara, después sus dientes. La mirada preocupada de su esposa le inquietaba un poco. Sí, llevaba alrededor de una semana vomitando en las mañanas, sintiéndose cansado por las tardes y teniendo mareos, incluso en su trabajo. Pero no preocuparía a su esposa.

- A-Xuan... - Jiang Yanli le miró, como quien tiene una idea – Ve abajo y cuida la comida en la estufa ¿sí? –

Zixuan asintió y, después de besar la frente de su esposa, fue a la cocina. Jiang Yanli entró al baño y fue directo al cajón del mueble que tenían allí. Estaban un par de cajitas que tenía guardadas desde hace tiempo....

¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬

- Y le pregunté si podía ser Elsa – Zixuan escuchaba a su hijo – pero me dijo que no – contestó un enfurruñado Zizhen.

- ¿Y qué hiciste? –

- Le dije que yo merecía ser Elsa porque me sabía todas las canciones, y mis amigas me apoyaron – Zixuan comía junto al niño, le habían servido un plato a Yanli también, quien venía bajando de la habitación con una sonrisa brillante – Mamá, papá pavo dice que puedo llevarme mi peluche a la escuela –

- Puedes, corazón – ella se sentó frente a Zixuan, acariciando de paso la cabeza de su hijo – Pero no te vayas a distraer en las clases –

- No lo haré, lo prometo –

- Muy bien – Zixuan sabía que algo pasaba con Yanli. Su amada siempre sonreía, parecía tan natural en ella, incluso cuando dormía. Y esa mañana estaba sonriendo, pero había algo más... algo que comenzaba a preocuparle.

- A-Li... -

- A-Xuan –

- ¿Estás bien? –

- Sí, termina tu desayuno para ir al hospital después de dejar a A-Zhen –

- Pero, A-Li... -

- Nada de peros, llevas mal una semana. No es normal, A-Xuan –

Jin Zizhen veía a sus papás. Mientras su mamá seguía sonriendo, su papá tenía una cara de tristeza...

- Papá pavo – le llamó, tomando la mano del hombre – el doctor no es malo, te cura – Yanli soltó una risita, y Zixuan solo sonrió, dándose por derrotado.