La elección de Leon

Capitulo 9

Con suspiro que parecía pesar media tonelada, continuó—No es lo suficientemente intuitiva para saber cual es el hombre correcto—De pronto, sonrió como si estuviera recordando algo—Por suerte se dio cuenta antes de hacer... ya sabes.

Desvié mi ojos aún lado, ajeno a lo que ella quería insinuar.

—No, no entiendo...—Dije arrugando mi ceño.

—Hablo de casarse, mi amiga se había comprometido con él hace un par de meses, no me dio tantos detalles, pero creó que se casarían a final de año, por suerte ya no será así.

—Entiendo—Replique.

—Si, pero al menos tendré una excusa para no ir a trabajar mañana—Reímos por el comentario, pero sabía que a ella no le había parecido gracioso.

—Y porque no me cuentas más de ti León, ¿Ya tienes un lugar en la ciudad?

—Si, de hecho si, renté un departamento, bueno después de todo, será temporal.

De inmediato ella espeto—Sabes, cuando te vi en aquel bar supe de inmediato que eras tú, pero negué que tú visitaras esos lugares, siempre creí que no eran tu estilo.

—Y no lo son, soy más de embriagarme a solas... pero había tenido un día para nada positivo, y ví el beber como una escapatoria a todo ello.

Con sarcasmo agregó—Bonita forma de escapar a tus problemas León.

—Claire... Te sorprendería lo común que soy, más allá de mi faceta de agente 007, soy alguien normal que busca una vida normal, en mundo cada más caótico.

Inclinándose ligeramente hacia mi dijo—¿Y como vas con eso?

—... más o menos bien.

Afortunadamente nuestros alimentos llegaron y aligeraron de mejor forma nuestra estancia allí, comenté de forma burda lo que había hecho en esos años en los cuales ella y yo nos perdimos uno del otro, a Claire le parecía gracioso que terminé varado en una isla meses antes de estar aquí con ella, supongo que no es algo que se escucha todos lo días.

Por su parte, Claire fue mucho más meticulosa sobre lo que decía, generalmente a cada pregunta que le hacía, su respuesta era escueta y con falta de detalles, sus agraciadas expresiones fáciles resultaban tan difíciles de ignorar, como de olvidar, prácticamente y sin mucha dificultad, Claire podría ser unas de las presencias femeninas más hermosas que jamás he visto, y que por alguna razón, hoy se veía mucho más agraciada que antes.

Era sumamente extraño pensar en eso, tomando en cuenta que era mi amiga y que, hasta donde sabía, ella nunca había mostrado interés en mí, creer o sentir pensamientos más allá de la amistad, me avergonzaban y sepultaban la poca cordura que aún conversaba.

En un momento dado, y ajeno a cómo llegamos ahí, tocamos el tema más inesperado y extraño para los dos.

—Por cierto León, no me has dicho cómo va tu relación con Ángela.

Confundido, tuve que responder—¿Qué? No, no salgo con Ángela de hecho ni siquiera la he visto en meses.

—Pero creí que ustedes dos...—Levanto sus cejas intentando ser obvia sin haber terminado su oración—No...—Dije—Créeme, lo máximo pudimos hacer juntos Ángela y yo, fue salir un par de veces a la pista de hielo, ir a cenar y tal vez, pasar un día juntos, ahora que lo pienso, en ningún momento fuimos oficialmente pareja.

—Wow...—Increpo Claire sorprendida—Siempre pensé que era tu novia, sobre todo porque ese día cuando te fuiste en el helicóptero...

—No se si te alegrará saber esto Claire—Espete tras haberla interrumpido—pero, Ángela no era exactamente mi tipo.