22. Obsesión

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Serena, salgo a bailar con el príncipe Diamante, aunque me habla me cuesta mucho poder concentrarme, solo pienso en Darien y en su accidente, como fue capaz Seiya en hacerle algo así y justificarlo en base al amor.

Diamante, princesa Serena, esta bien esta muy distraída, por que estabas tan tensa hace un rato hablando con el príncipe Seiya, sucedió algo con el, nada de que preocuparse príncipe Diamante solo un mal entendido.

Sabes princesa, sin duda que ese vestido te hace ver más hermosa que nunca, cuando seas mía quiero que siempre luzcas tan perfecta como hoy, no permitiré que nadie pose los ojos en ti, eres como un ave exótico, algo único e irreemplazable.

Serena, príncipe Diamante porque deseas casarte conmigo, esa es una pregunta muy sencilla princesa, cuando nos cacemos, por que lo aremos, de eso no hay duda alguna princesa, porque que esta tan seguro de que yo lo elegiré a usted, recuerde que también esta el príncipe Darien.

El no es rival para mi, nunca lo ha sido príncesa y nunca lo será, nosotros no somos como los demás, somos de la realeza, sangre pura corre por nuestras venas y como tal buscamos obtener más y más poder, todo se base en obtener más poder, al unir nuestros reinos todo el mundo estará a nuestros pies, nadie osara estar en nuestra contra, todos serán déboto de Nemesis  solo un reino será el regente de todo, que pasara si yo no te elijo a ti, lo aceptaras, princesa ustedes es inteligente de eso no hay duda alguna, que ventajas sacaría su reino si aceptas a el príncipe Darien, es débil, tiene escolta, se deja guiar por el oráculo y los mandatos de los dioses, por un oráculo que no se muestra y además te ocupa como un escudo, se esconde detrás de ti, un ser tan divino como tu, te pone en riesgo callar tal secreto, acaso no es por eso que la orden oscura ha intentado secuestrarte en más de una ocasión, acaso no lo ves.

Pero cuando seas mía, todo eso cambiará, ya no tendrás que tener aquella pesada carga, aremos lo que nosotros queramos, y si no te eligo, que aras príncipe Diamante, creo que tu sabes bien lo que pasara si no me eliges, soy tu única opción.

Serena, siento cuando el aprieta mi mano fuertemente, tu debes ser solo mia, seras mi reina, y no la del príncipe o la de mi padre, por que dices eso príncipe Diamante, vamos princesa Serena, se que has notado que mi padre pone una atención especial por ti, ese vestido es una clara señal de eso, me quedo inmóvil cuando se me acerca al oído y mi me dice, pero antes lo mato yo mismo, no me importa que sea mi padre, lo entiendes verdad.

Serena, después de las palabras del príncipe no hablamos más durante toda la noche, cuando el baile acabó me retire junto a las chicas a mi recámara, ellas con mucho cuidado me sacaron el vestido y como temía mis caderas estaban muy lastimadas productos del peso de aquel vestido, mi piel estaba al más que roja.

Lita, por los dioses Serena, tus caderas, como fue que aguantaste tantas horas con este maldito vestido, y eso que te vi bailar sin dificultad toda la noche, no me retén ya tengo suficiente con el dolor que siento.

Emi, te prepararé un enguentos para tus caderas eso se pondrá horrible en la mañana.

Rei, por que le pegaste una cachetada al príncipe Seiya, lo vieron verdad, que si lo vimos, menos mal que estamos al pendiente de ti y logramos evitar que alguien más viera aquella escena, que fue lo que paso.

Serena, me recuesto en la cama, tomo aire y les digo, ya se por que Darien y los chicos no vinieron a este baile, que sucede Serene, Mina Seiya corto las cuerdas de la montura del caballo de Darien, lo hizo a propósito para que se accidentara y viniera el en su lugar dice que me ama y justifica su actuar con aquel sentimiento por mí.

Hotaru, Serena estás segura de eso, el no serian capas de algo así, el príncipe Darien es su hermano.

Serena, yo lo vi, no se por que no lo vi antes y además el me lo confirmó.

Yo Elijo Mi Camino, Y Te Elijo A Ti (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora