22 de junio: en ocasiones

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En ocasiones los enamorados cometen errores, el olvido nos traiciona y las falsas ilusiones son el motor para corregir una historia de amor que nos marco.

¿Yo quería corregir lo nuestro? O ¿Esto se le podría llamar un nosotros?

Tenía la certeza de que lo dejarías, que volverías a mi como prometiste, o que no me dejarías como lo juraste, creo que jamás entenderé al amor y porque no hace daño.

Ojalá pueda olvidarte.

Ojalá pueda dejarte.

Ojalá, simplemente un ojalá. ¿Pero dónde está el olvido? El tiempo pasa y sigues tan dentro de mi como el primer día que aparecieron este montón de emociones por ti.

Mis tal vez no solo hieren a los demás, sino que ahora tu te convertiste en mi enorme tal vez, y aquí estoy yo, declarándome enamorada y afirmando que lo nuestro es un tal vez.

25 de junio: ahogando mis penas.

Me ahogue en el botella de vino, con el propósito de olvidarte y terminé recordando.

Odrwi estaba a mi lado, y me veía tomar, sus ojos mieles estaban clavados en la botella.

—¿Cuándo lo piensa dejar?— indague aún con la botella en mi boca.

—Otra vez con lo mismo— susurro aburrida.

—¿Tengo cara de idiota, Odrwi?— indague sarcástica —. Mierda, me dices que lo dejaras y luego quieres evadir el tema.

—¿Podemos hablar de algo más?

—Nunca lo vas a dejar— declaré por ella.

—¿Puedes dejar de insistir? Ya sabes que no puedo dejarlo.

—¿Qué clase de amor sientes por mi?— mi voz se quebró, y lágrimas amenazaron por salir.

—Amor.

—Eso no es amor, no es puro. Más puro es el odio que siento ahora por ti.

Y era mentira, no la odiaba.

—¿Me odias?— me encogí de hombros dejándole la repuesta a ella.

—¿Cómo quieres que no? — exclamé —. Lo he dejado todo por ti, me he sacrificado como lo has pedido y ¿Qué has hecho tu? Seguir con el, eso es lo que has hecho.

—Te amo, Alex.

—Pues ya no me está gustando esa mierda que llamas amor.

Y luego de eso me levanté, mis ojos se encontraron con los de Andrés, el negó y volvió a limpiar las mesas de Laguna Azul.

Trague seco y salí de allí.


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Sinceramente a mi me dolió, es que no merecemos eso. Merecemos más.

Más amor, igual que el que podemos brindar.

Ig: yessss2_

Mi vida entre tu pecho ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora