Los pensamientos de Odrwi

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Hola, antes que nada les deseo un lindo día. Ahora les aclararé algunas cosas, el libro aún no se ha terminado pero antes de proseguir a algunas cosas de la vida de Alex, quería regalarles esto. Se que están conociendo un poco a Odrwi. Pero se que quieren más así que aquí vamos.




Odrwi

Podría hablarles de millones de cosas a la vez y aún tener ganas. Podía por medios de poemas o pensamientos un poco filosóficos ayudarles a entrar en razón. Pero nuevamente sigo siendo una sombra. Te hablaré de muchas cosas pero ninguna incluirá a las que me gustan, o tal vez te de una pista. Podré hacer lo que sea. Pero te será difícil conocerme.

He estado en este juego hace tiempo, siendo la sombra de la soledad, siendo nada en medio de tantos. no puedo hablarte de mi aunque quisiera. Porque en verdad quiero, pienso en todas las veces que me indagaste sobre mi pero fui tan cobarde y no pude decir.

No quiero hablar pero a tu lado parece que si. Eres tan frágil que no puedo pensar en otra cosa que en ti.

—¿Podré algún día saber algo de ti?— preguntaste con aquella sonrisa. Tus ojos marrones se llenaron de tanta curiosidad que no pude evitar sonreír.

—Alex, ya sabes lo suficiente— respondí tangente y cuando tú sonrisa se te borró de tu linda cara me lamenté internamente.

—¿Sabes Odrwi?

Mis ojos quedaron puesto en los tuyos.

—¿Qué se Alex?

—Que nunca me dirás la verdad, porque se que ocultas. Se que algo te atormenta porque siempre hablas con dolor. Y no sabes no sabes la oportunidad que pierdes al no decirme.

Arquee una ceja a tu dirección, no entendía lo que había detrás de tus palabras.

—Eso se llama psicología inversa, Alex— la señalé, por un momento me enojé pero ella corrió su silla y se levantó.

—No es nada de lo que dices Odrwi, solo no entiendes.

Y con eso te fuiste. No podía creer que te ibas, podía notar el cansancio en tus pasos al caminar. Pero no me levanté de allí, menos te seguí. Quería darte tu espacio. Pero no pensé que te tardarías tanto.

Luego de eso nos vimos unas semanas después. La verdad te extrañaba y enserio te quería ver, pero ese día Iván me pidió salir, y no podía decir que no.

Cuando hicimos contacto en medio de la calle tus ojos se llenaron de lágrimas al verme con el, al ver nuestras manos entrelazadas, no dijimos nada cuando pasamos por nuestros lados. Estabas muy callada y cuando bajaste la mirada solo vi lágrimas caer.

Quería protegerte pero a la vez te hacía daño. No podía dejarlo.

Quería protegerte pero no podía protegerte de mi.

Había mucha diferencia entre el y tú: el no era nadie a tu comparación, pero aún así tenía sentimientos encontrados, nunca los diferencie si era gratitud o amor, pero ahí estaba incluso cuando estuve contigo.






*****

Hola, ¿Como están? Tenía que dejar está nota; los pensamientos de Odrwi, es algo en lo que estoy trabajando saldrán en este libro obvio, tengo pensado que salgan dos o tres veces más. Como estamos en la recta final entonces ya. Esto es todo.

Mi vida entre tu pecho ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora