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Desperté porque escuché un ruido, al abrir los ojos me di cuenta que estaba en una habitación, volteé a un lado.
Vi a Lau y Bard dormidos recargado en la pared así que solo sonreí. Me habían traído ellos aquí.
Volteé al otro lado y vi al gato negro, el mismo gatito que estaba en la mansión conmigo y el mismo que me rasguño.
Me le quedé viendo, en ese momento sentí ganas de llorar de nuevo por alguna razón este gatito me recuerda mucho a Sebastian.Me acerqué a él y lo abracé, aquél gatito comenzó a ronronear.
-Lo siento...- le dije en un susurró mientras pegaba mi frente a su cabecita.
Cerré de nuevo los ojos y me volví a quedar dormida.
Más tardé desperté de golpe pues escuché la trompeta que sonaba Ada todos los días.
Cuando me levanté la vi a ella parada al lado de mi cama. Me le quedé viendo y ella volvió a sonar la trompeta haciendo que cayera de la cama.
-¡Deja de holgazanear _______! ¡Levantate y ayúdame con los pacientes!- me dijo
-Ya voy...no tenías que hacer eso.- dije mientras me levantaba.
Volteé a la pared en la que estaban Lau y Bard pero no estaba ninguno de los dos por suerte se habían ido antes. Me levanté y miré a la cama, el gato ya no estaba.
-¡Vamos! ¡Despierta, vamos a estar muy ocupadas!- dijo tomando mi mano
-Si Ada, ya voy. Los pacientes estarán bien, no tienes que preocuparte, te ayudaré con cada uno de ellos.
Ada soltó mi mano y se me quedó viendo.
-¿Lloraste?
-¿Qué? Claro que no, es porque bostece ¿no me viste?
-No...pero bueno, ¿vamos?
-Si...
Arreglé mi ropa y luego salí de la habitación con Ada. Me di cuenta que estábamos en los pasillos cercanos a sus habitaciones de los chicos, por eso se fueron tan rápido pero ¿a qué hora se fueron?
-¿Ya ejercitaste a los demás?- pregunté
-Si, de hecho pensé que a esa hora estarías cuidando de los pacientes pero parece que me equivoqué.
-Lo siento pero me sentí muy cansada. Tenía que dormir para poder estar bien al siguiente día
-Si pero debiste haberme dicho. Así te hubiera checado.
-¿Porque? No es necesario, solo con dormir es suficiente. Ahora ya estoy bien.- le sonreí
-Eso es bueno.- me sonrió.- Bien, empecemos el día.
-¡Si!- le contesté
Entonces estuve de paciente en pacientes cuidando o curando. También hablaba con ellos pero con quién más me gustaba hablar era el abuelo Nicolás.
Solía contar historias muy divertidas y de cuando era joven.
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Broken Memories (Sebastián y tú) Libro 2
Fanfiction¿Que pasará cuando tú y Ciel se enteren de que tienen otro hermano? Aparte de que es hermano gemelo de Ciel. ¿Harás lo mismo que por el hermano que ha estado siempre contigo? ¿Lo querrás cuidar de la misma manera? ¿También darías todo por él? ••••••...