Capítulo 36: ¿KATHY ES INFIEL?

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Observé la carta otra vez. La abrí con cuidado de no romperla, pero con rapidez. Tenía mucha curiosidad por saber lo que había dentro de ella. Quería acabar ya de una vez por todas con el de los mensajes. Quería por lo menos averiguar quién es. Y también, quería saber porqué hacer todo esto, en vez de hablar o dialogar como personas civilizadas. Me estaba empezando a cabrear y cada vez tenía más ganas de descubrir quién era aquella persona que se había metido en nuestra vida, sin ningún tipo de permiso.

—¿Qué hay? —cuestionó Becket nerviosa.

Saqué tres fotos con precaución. Como no quería verlas, las tiré en la cama de mi amiga en un intento de escapar de ellas. Becket me miró como si estuviera loca y a la vez sabiendo porque acababa de hacer tal cosa.

—Muy bien, las veré yo primero —me indicó mientras recogía las fotos.

Miré a Becket preocupada y ella se quedó mirando las fotos con mucha atención.

—Necesito llamar a Christian —pensé entre nerviosa y preocupada.

La cara que puso mi amiga solo hizo que me preocupara aún más.

Esto no puede estar pasando.

—A Christian no le puede haber pasado nada. Por favor que esté bien —rogué desesperada en mi interior.

Pero la cara de Becket solo me hacía pensar mal.

¿Por qué tardaba tanto en mirar las fotos? Qué me las dé ya y me quite este dolor que sentía ahora mismo.

—Esto es peor que una tortura —pensé impaciente por saber que había en esas fotos.

—Becket, ¿ya? —le pregunté cansada de tanto esperar.

—Creía que no querías verlas —me contestó con mucha razón. Me conocía demasiado bien.

—No sé si quiero —le dije con miedo por Christian.

—Yo no las miraría —me recomendó Becket con la voz seca.

—Pero, ¿por qué? ¿Qué pasa? —pregunté incluso con más miedo aún.

—Tenemos un problema. Bueno más bien, tienes un gran problema —ella respondió a mis preguntas y pude notar por sus ojos que tenía más miedo que yo.

—Pero, ¿de qué tenía miedo? —interrogué en mi mente con más curiosidad por las fotos que antes.

—Amiga, me estás asustando más de lo que ya lo estoy —le informé haciendo que parase y me pasase las fotos.

—Toma, pero que sepas que te he advertido —me avisó posando las fotos en mis manos.

Las agarré con el pulso de mi mano temblando. No pude parar de pensar en lo peor y en preguntas como: ¿le habrá pasado algo a Christian o a Mike?, ¿otro asesinato más?, ¿el cadáver de la chica?

Antes de mirar las fotos, lo pensé. No sabía si era buena idea verlas la verdad. Si Becket estaba así, debía de ser por algo muy grave y preocupante.

—Todo menos Christian —pensé mientras les daba la vuelta a las fotos.

Okay, ya podía entender porque Becket se había puesto así. Observé la primera foto notando mi cara más blanca. Tenía que estar muy pálida ahora mismo.

Primera foto: el cadáver de la pobre Brittany.

—Cómo no, tenía que mandarnos esto —le comenté a mi amiga con ironía mostrándole la foto.

Ella apartó la cara y me dió una mala mirada.

—No necesitaba verla otra vez, gracias.

—Lo siento —me disculpé viendo como mi amiga ponía una cara de horror.

Deja que cuide de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora