my 𝗔𝗡𝗧𝗜𝗗𝗢𝗧𝗘. Harry Styles✨

𝟰𝟭

❝ 𝚆𝚎'𝚛𝚎 𝚜𝚖𝚒𝚕𝚒𝚗𝚐 𝚋𝚞𝚝 𝚠𝚎'𝚛𝚎 𝚌𝚕𝚘𝚜𝚎 𝚝𝚘 𝚝𝚎𝚊𝚛𝚜, 𝚎𝚟𝚎𝚗 𝚊𝚏𝚝𝚎𝚛 𝚊𝚕𝚕 𝚝𝚑𝚎𝚜𝚎 𝚢𝚎𝚊𝚛𝚜
𝚆𝚎 𝚓𝚞𝚜𝚝 𝚗𝚘𝚠 𝚐𝚘𝚝 𝚝𝚑𝚎 𝚏𝚎𝚎𝚕𝚒𝚗𝚐 𝚝𝚑𝚊𝚝 𝚠𝚎'𝚛𝚎 𝚖𝚎𝚎𝚝𝚒𝚗𝚐
𝙵𝚘𝚛 𝚝𝚑𝚎 𝚏𝚒𝚛𝚜𝚝 𝚝𝚒𝚖𝚎
𝙾𝚑, 𝚝𝚑𝚎𝚜𝚎 𝚝𝚒𝚖𝚎𝚜 𝚊𝚛𝚎 𝚑𝚊𝚛𝚍
𝚈𝚎𝚊𝚑, 𝚝𝚑𝚎𝚢'𝚛𝚎 𝚖𝚊𝚔𝚒𝚗𝚐 𝚞𝚜 𝚌𝚛𝚊𝚣𝚢
𝙳𝚘𝚗'𝚝 𝚐𝚒𝚟𝚎 𝚞𝚙 𝚘𝚗 𝚖𝚎, 𝚋𝚊𝚋𝚢.  ❞

« ғᴏʀ ᴛʜᴇ ғɪʀsᴛ ᴛɪᴍᴇ »
ᴛʜᴇ sᴄʀɪᴘᴛ
—— ✺ ——————————— ✺ ——

🆁estriego mis ojos, soltando un bostezo mientras salgo de la habitación y acomodo mi cabello en un moño alto desordenado. Chasqueo mi lengua como queja puesto que he dejado mi teléfono dentro de la habitación y, aunque no puedo saber la hora, estoy segura que es bastante temprano, incluso para que ambos estemos despiertos.

—No, no lo sé.

Frunzo el ceño con la voz de Harry desde el salón, pero enseguida noto que está al teléfono cuando me acerco. Está de espaldas a mi, no lleva nada puesto sobre la parte superior de su cuerpo y se mueve de un lado a otro, como si estuviese desesperado, sin mencionar que pasa sucesivamente su manos de su cintura a su frente, masajeándola y cuando decido acercarme, vuelve a hablar.

—No te digo que no voy a intentarlo. —niega—. Pero no pienso discutir eso, no con una abogada. —aclara y me desconcierta—. Mucho menos porque esa abogada es mi novia.

—Bu...

—Te hablaré luego, Jeff. —me interrumpe, pero aún no nota mi presencia y cuelga la llamada.

—Buenos días. —digo por fin.

Harry levanta la mirada de su teléfono para mirarme y ladea su cabeza con una sonrisa sobre sus labios. A pesar de la clara muestra de desesperación en su rostro, su entrecejo se relaja y antes que él decida acercarse, lo hago, desviando la mirada hacia Moon quién salta desde el sofá para rogar que la levante entre mis brazos.

—Buenos días, bebé. —Harry me rodea por los hombros y besa mi frente.

—Uhm... —cierro mis ojos mientras disfruto sus labios sobre mi frente—. ¿Es muy temprano no?

—Bastante. —suspira y me alejo para mirarle a los ojos.

—Lo siento. —chasqueo mi lengua—. ¿Qué es lo que no quieres discutir con tu novia abogada?

—Aquí vamos. —murmura y enarco una ceja.

—Tengo mucha hambre. —masajeo mi vientre—. ¿Por qué no me cuentas mientras preparamos desayuno?

—O podemos saciar esa hambre de otra manera. —desliza sus manos sobre mi cintura.

—Moriré deshidratada y te aseguro que no quieres eso. —bromeo—. Andando, cuéntame.

Me alejo de él, riendo por su queja mientras salgo del salón en dirección a la cocina, seguida por él y sonrío agradecida porque ya ha preparado café al menos. Harry toma asiento, sin despegar la mirada de su teléfono, masaje constantemente su frente y la verdad es que su actitud me confunde cada vez más, despertando más curiosidad por saber lo que está pasando.

—¿Mi amor...? —me acerco a él.

—No sé ni siquiera como decírtelo. —mira al techo por unos segundos y luego extiende su teléfono—. Míralo tú misma.