my 𝗔𝗡𝗧𝗜𝗗𝗢𝗧𝗘. Harry Styles✨

𝟲𝟰

❝ 𝑻𝒉𝒆𝒚 𝒘𝒊𝒍𝒍 𝒏𝒆𝒗𝒆𝒓 𝒈𝒆𝒕 𝒕𝒐 𝒕𝒉𝒆 𝒉𝒆𝒂𝒓𝒕 𝒚𝒐𝒖 𝒉𝒐𝒍𝒅 𝒊𝒏𝒔𝒊𝒅𝒆
𝒀𝒐𝒖'𝒓𝒆 𝒏𝒐𝒕 𝒕𝒉𝒆 𝒐𝒏𝒍𝒚 𝒐𝒏𝒆 𝒔𝒐 𝒍𝒆𝒕 𝒕𝒉𝒆𝒎 𝒄𝒓𝒊𝒕𝒊𝒄𝒊𝒛𝒆
𝒀𝒐𝒖'𝒓𝒆 𝒖𝒏𝒕𝒐𝒄𝒉𝒂𝒃𝒍𝒆 𝒘𝒉𝒆𝒏 𝒚𝒐𝒖 𝒓𝒆𝒂𝒍𝒊𝒛𝒆
𝑪𝒉𝒂𝒏𝒈𝒆, 𝒄𝒉𝒂𝒏𝒈𝒆 𝒚𝒐𝒖𝒓 𝒍𝒊𝒇𝒆, 𝒕𝒂𝒌𝒆 𝒊𝒕 𝒂𝒍𝒍
𝑾𝒆'𝒓𝒆 𝒈𝒐𝒏𝒏𝒂 𝒔𝒕𝒊𝒄𝒌 𝒕𝒐𝒈𝒆𝒕𝒉𝒆𝒓, 𝒌𝒏𝒐𝒘 𝒘𝒆'𝒍𝒍 𝒈𝒆𝒕 𝒕𝒉𝒓𝒐𝒖𝒈𝒉 𝒊𝒕 𝒂𝒍𝒍
𝒀𝒐𝒖'𝒓𝒆 𝒈𝒐𝒏𝒏𝒂 𝒖𝒔𝒆 𝒊𝒕 𝒕𝒐 𝒃𝒆𝒄𝒐𝒎𝒆 𝒘𝒉𝒂𝒕 𝒚𝒐𝒖'𝒗𝒆 𝒂𝒍𝒘𝒂𝒚𝒔 𝒌𝒏𝒐𝒘𝒏. ❞

«ᴄʜᴀɴɢᴇ ʏᴏᴜʀ ʟɪғᴇ»
ʟɪᴛᴛʟᴇ ᴍɪx

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🅲ruzo mis brazos, apoyándolos sobre el escritorio, frente a mi ordenador y leo en silencio, el mensaje, de la administración de una marca muy reconocida a nivel mundial, sobre la invitación a participar en una campaña publicitaria. A penas una sonrisa se apodera de mis labios con la idea, pero aún más porque definitivamente la campaña de Bruce y Josh ha tenido tanto éxito que incluso he recibido varias ofertas, sin ser profesional en esto.

La pantalla de mi ordenador, alumbrándose ahora con una videollamada entrante de mi hermano, me despierta a la realidad y dejo escapar un suspiro a la vez que contesto. Tenemos o al menos tengo un montón de asuntos a resolver antes de tomar una decisión clara sobre lo que quiero hacer, aunque espero que él entienda lo que ya parece bastante obvio.

No han sido días fáciles, me he cuestionado tantas cosas, tantas veces, si estoy totalmente segura de lo próximo que viene para mi vida, sin embargo en cada una de ellas, esta vez, he puesto por encima como me sentiré al respecto y me ha servido para tomar decisiones claras.

—Listo. —Charles acepta las últimas propuestas que ofrezco—. ¿Podrías tener este proceso listo antes que finalice noviembre?

—Seguro. —asiento.

—Ya. —cierra la carpeta frente a él y suspira, mirándome fijamente—. ¿Cómo estás?

—Yo... Avanzando. —evito su mirada por un instante.

—Lamento lo de la demanda. —dice con cuidado.

—Era algo que debía esperar, solo no estaba tan segura de poder hacerlo y aceptarlo. —encojo mis hombros.

—¿Y ahora?

—He contra demandado. —contesto—. Y con ello ahora tengo a un millón de gente juzgándome.

—¿Por qué?

—La prensa habla sobre mi falta de empatía al querer acabar con el empleo de una pobre chica. —me río, una risa triste, sin poder creer que eso es lo que está pasando—. Pero nadie sabe todo lo que me ha causado que ella haya decidido vender mi privacidad.

—Es absurdo. —se ríe, amargamente.

—Es por el dinero, es por quién soy, es por cómo me he movido con todo esto. —suspiro.

—Pues yo y todos a tu alrededor sabemos quién eres. —extiende sus manos—. Sé que te afecta, tanto como todo lo que dicen ahora de ti, pero ellos no te conocen y no tienen derecho a opinar sobre cómo estás haciendo las cosas.