MI FAMILIA PERFECTA

Capítulo 57

Hanna
-Hanna, disculpa lo qué pasa es que la señorita Rebeca acaba de llegar.
-Perfecto dile que pase por favor.
-Claro.
-Gracias.

-Hola.
-Hola Rebeca, pasa por favor.
-Gracias.
-No sabes que feliz estoy de que por fin podamos conocernos.
-Lo sé, hemos estado hablando por meses y por fin nos conocemos.
-Ponte cómoda por favor.
-Gracias.
-¿Quieres algo de beber?
-Un café por favor.
-Claro.

Le pedí a mi asistente un café y un vaso con agua, no tardo mucho llegar y le pedí que por favor no nos molestara nadie.

-Te ves muy linda con tu pancita de embarazada.
-Gracias, la verdad estoy muy feliz y emocionada con el embarazo.
-Me imagino ¿Y ya sabes que será?
-Sí, es un niño.
-¡Felicidades!
-Gracias.
-Hanna hemos estado en contacto por bastante tiempo y nunca me has hablado de tu marido.
-Bueno es que en realidad aún no estamos casados, pero ya nos hemos comprometido y ahora solo falta ver la fecha de la boda.
-Que... Bien.
-Sí, pero bueno no estás aquí para que te cuente sobre mí; estamos aquí para una reunión de trabajo.
-Ah si, bueno mira esto es lo que queremos para la empresa.
-... Es bastante lindo aunque muy rosado.
-Buenos es una empresa 100% liderada por mujeres, diseñada para y por mujeres así que quisimos diseñar todo muy femenino.
-Tienes razón aunque no por el hecho que sean todas mujeres quiere decir que todo deba ser rosado.
-Y es justo por eso que estoy aquí; quiero que seas tú quién haga el nuevo diseño de toda la publicidad de la empresa, nos vamos a renovar este año y queremos cambiar absolutamente todo para que deje de verse como una empresa liderada por niñas y que se note que somos mujeres adultas y profesionales en lo que hacemos.
-Perfecto, entonces trabajemos en ello.

Estuve en reunión casi toda la mañana con Rebeca y la verdad era que cuando estuve fuera de la empresa no me di cuanta cuánto me gustaba trabajar y estar ahí. Eso me hacía realmente feliz.

-Bueno entonces en eso quedamos.
-En cuánto tenga los bocetos y las primeras muestras y mi jefe me de luz verde podemos empezar a trabajar en grande.
-¡Perfecto, ay estoy muy emocionada!
-Yo igual.
-Por cierto antes de irme me gustaría darte una invitación para la cena por mi cumpleaños y me encantaría que estuvieras ahí.
-Muchas gracias Rebeca.
-No puedes faltar, son dos pases para que vayas con tu prometido.
-Ahí estaremos, Gracias de nuevo.
-A ti, ahora la empresa será todo lo que siempre quise; nos vemos.
-Adiós.

Rebeca era una mujer muy linda, de mucha clase y elegancia.

Justin
-Hanna.
-Hola, pasa.
-Oye amor estuve... ¿Tuviste visita?
-¿Por qué?
-Una tasa de café.
-Ah sí, vino la mujer de la que te hablé anoche.
-¿Tan pronto?
-Sí al parecer va a renovar toda la imagen de su empresa y le urge empezar a trabar pero todavía no has visto el proyecto así que no puedo hacer nada.
-Mi amor sabes que confío en ti al 100% así que prepara el contrato y dámelo para firmar así que podrás empezar a trabajar lo antes posible.
-¿En serio?
-Sí.
-¿Pero no lo vas a revisar antes?
-Eres la mejor en lo qué haces, no necesito hacerlo.
-Pero.
-Nada, has el contrato y lo firmo.
-Está bien ¿Qué querías decirme?
-¡Ah sí! Estuve viendo algunas cosas para el cuarto del bebé pero la que sabe de diseño eres tú así que quería mostrarte para que me dieras luz verde.
-¿Has estado viendo cosas para el bebé toda la mañana?
-Sí.
-¡Que lindo mi amor!
-Bueno también para Mia, pensaba re decorar la habitación de ella ahora que está más grande y preparar todo para la habitación del bebé... Ah por cierto ¿Sabias qué hay diferentes tipos de car seat dependiendo de la estatura, edad y peso del bebé?
-Lo sé amor.
-Yo no sabía, cuando compré el de Mia la chica de la tienda me llevo directo al de ella.
-Porque la llevaste, vio a Mia y por eso fue.

Hanna solo sonreía mientras me veía y no sabía si era bueno o malo.

-¿Por qué te ríes?
-Porqué es lindo verte así, tan emocionado y entregado a los niños.
-Pues claro, son mis hijos ¿Cómo no lo estaría?
-Justin.
-¿Humm?
-Eres el mejor papá del mundo.
-No sé si sea el mejor del mundo, pero al menos quiero ser el mejor para mis hijos.
-Lo eres.

Me recargue en el escritorio de Hanna y vi una invitación bastante elegante.

-¿Y esto?
-Mi clienta me invitó a su cena de cumpleaños y adivina.
-¿Qué cosa?
-Son dos pases, me dijo que fuera contigo.
-No siquiera me conoce.
-Lo sé pero también me dijo que no podíamos faltar, que si lo ves de otro modo eso sería bueno para nosotros.
-Por la empresa.
-Exacto, sí a esa fiesta va gente que se dedica a lo mismo que ella ¿No crees que en el futuro necesiten una empresa como la tuya? Todo Nueva York quiere trabajar contigo.
-Está bien pero solo iremos un rato ¿Está bien?
-Ok.
-Hanna.
-¿Si?
-Si ya terminaste tus reuniones entonces podemos salir a almorzar.
-Bueno me iba a poner a hacer los bocetos pero supongo que puedo hacerlos más tarde.
-¿Vamos?
-Está bien.
-Ok, te espero en mi oficina; voy por mi saco y nos vamos.
-Está bien.

Era raro que saliéramos a comer juntos mientras estábamos en la oficina, pero no solo quería ir a comer con ella sino que también quería ir a comprar algunas cosas para Mia y para el bebé.

-Justin pensé que iríamos a almorzar, no a un centro comercial.
-Iremos después de que compremos un par de cosas.
-¿Qué cosas?
-Un obsequio para Mia y algunas cosas para el bebé.
-¿Qué?
-Necesitamos el car seat, empezar a comprar ropa y cobijas...
-Amor, amor tranquilo, todavía faltan 17 semanas para que nazca todavía hay tiempo.
-Lo sé, pero... Todavía no me creo que voy a ser papá.
-¿Quieres empezar a ver cosas del bebé para creerlo?
-Eso creo.
-Está bien, entonces compremos algo de ropita y algunas cosas pequeñas.
-Gracias.

Hanna
Entramos a una tienda de maternidad y bebés que había en la plaza y Justin se estaba volviendo loco tomando mucha ropa de todas las tallas para el bebé, pero no podía hacer nada para detenerlo.
Cuando fuimos a pagar jamás imaginé que fuera a gastar tanto dinero en una sola compra.