Capítulo 2

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Terminé lo que tenía pendiente y me fui a mi departamento, desde que tenía la agencia vivía en un departamento de lujo en Manhattan donde hacía las mejores fiestas con mis amigos y las chicas más lindas de Nueva York. Mi mejor amigo Harry vivía en el mismo edificio que yo así que casi siempre estábamos juntos además de ser accionista de la agencia. Me estaba sirviendo un vaso de agua cuando llegó Harry a visitarme.

-Cuentamelo todo hermano... ¿Cómo te fue con Diana anoche?
-¿Qué no era Mónica?
-Cierto.
-Bien, nada nuevo.
-¿Nada nuevo?
-No... ¿Agua?
-Por favor... Hermano sé que has estado con tantas mujeres que ya lo has hecho todo pero esa chica es una Diosa.
-Toma... Ya sé pero no me sorprendió.
-Justin...
-¿Mmm?
¿Estás bien?
-Sí ¿Por qué?
-Hermano estoy empezando a creer que a ti ya no te gustan las chicas.
-No seas idiota, claro que me gustan.
-Espera... ¿Será que Justin Andreotti quiere algo serio con una mujer?
-¡No digas eso ni de broma!
-Estás actuando muy extraño Justin.
-Harry, hoy en la mañana fui a la agencia.
-Como todos los días.
-Una chica subió al ascensor cuando iba a mi oficina y justo en ese momento se fue la electricidad.
-¿Y era un fantasma?
-Hablo en serio.
-Bueno ya perdón, sigue.
-Creo que ella no sabía que yo soy Andreotti.
-¿Cómo no lo iba a saber?
-No sé, no sé si trabaja en la agencia o iba a buscar a alguien pero ella no me trató como las otras y menos se intimidó conmigo.
-Porque no le gustaste.
-Fue extraño.
-¿Qué no le gustaras?
-No, ella es... Diferente.
-Es un extraterrestre.
-Que idiota eres Harry.
-Tú dijiste que es diferente... Bueno y a todo esto ¿Cómo se llama la chica misteriosa?
-Hanna Nowak.
-Mmm... Es la Polaca.
-¿¡La conoces!?
-Sí.
-... ¿De dónde?
-De la agencia.
-¿Trabaja en la agencia?
-No sé pero la vi una vez y escuché que la llamaron por ese apellido, no es común aquí en Nueva York.

Suspiré inconscientemente y tomé de mi vaso de agua, Harry no dejaba de verme extrañado pero no entendía la razón.

-¿Qué?
-Suspiraste.
-No.
-Sí lo hiciste.
-No lo hice.
-Lo hiciste, yo te vi.
-¡Ya!
-Okay... Pero lo hiciste.

Hanna
Fui a casa después de la oficina, mamá no estaba y es que había olvidado que se iría a un viaje con mi tía por Europa durante un mes como parte de la recuperación por la pérdida de papá, estaba tan acostumbrada a mamá que me sentía un poco sola en la casa. Llamé a Noah (mi mejor amigo) para vernos y hablar un poco, no tardó demasiado en llegar a mi casa.

-Hola.
-Pasa.
-Traje pizza.
-Gracias.
-Mirame.
-¿Qué?
-Mirame... ¿Quién es?
-No entiendo.
-Tus ojitos brillan.
-Claro... Porque estoy de vacaciones está semana y tú también.
-Gracias a Díos te tomas una semana para ti.
-La necesito, amo trabajar pero también quiero salir y distraerme aunque sea una semana.
-Y que mejor que juntos... Hanna.
-No empieces Noah.
-Hanna por favor escuchame.
-Ya sé lo que vas a decir y tú sabes que...
-No quieres lastimarme pero no quieres una relación por ahora, Hanna sabes que te quiero.
-Y yo a ti pero no de la manera que tú esperas.
-Me has dicho lo mismo desde hace 11 años.
-Y no ha cambiado nada, eres como mi hermano y lo sabes.
-Mejor ya no hablemos de eso.
-Tú empezaste.
-Y yo termino.

Justin
-Casi olvidó a lo que venía... El proyecto con los Italianos.
-¿Qué pasa?
-Nuestro departamento de relaciones públicas envío el correo está mañana y es una gran oportunidad para la agencia hacer ese negocio.
-Entonces hagámoslo.
-Tengo el contrato que hicieron ellos para que lo leas y tomes la decisión.
-Hasta ahora no hemos tenido problemas con los contratos que ellos hacen.
-Desde hace dos años no hemos tenido problemas con los contratos y recibimos ofertas muy buenas de trabajo e incluso mejores que las de tus amigas.
-Cierto... ¿Sabes quién está encargado de eso?
-No, yo no me relaciono con ese departamento pero si quieres investigo.
-No es necesario.
-Bien.

Leí el contrato y como siempre era perfecto, lo firme y llamé a mi asistente para que agentdara una cita con los Italianos y cerrar el contrato lo antes posible, no podía esperar a empezar a trabajar con ellos.

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