Enamorada de Potter (Harry Potter y tu)

61- El Excelente Despido de la Profesora Trelawney

TRÁGICO FALLECIMIENTO DE UN FUNCIONARIO DEL MINISTERIO DE LA MAGIA

Anoche el Hospital San Mungo prometió llevar a cabo una investigación en toda regla, tras ser descubierto muerto en su cama el funcionario del Ministerio de Magia Broderick Bode, de 49 años, estrangulado por una planta. Los sanadores que acudieron en su ayuda no lograron reanimar al señor Bode, que unas semanas antes de su muerte había sufrido un accidente laboral.

La sanadora Miriam Strout, que estaba a cargo de la sala del señor Bode en el momento del incidente, ha sido suspendida de empleo aunque no de sueldo, pero ayer no quiso hacer declaraciones; no obstante, un mago portavoz del hospital declaró lo siguiente:

"San Mungo lamenta profundamente la muerte del señor Bode, cuya salud estaba mejorando notablemente antes de este trágico accidente.

"Existen estrictas directrices sobre los objetos decorativos permitidos en nuestras salas, pero al parecer la sanadora Strout, ocupada con las celebraciones navideñas, no reparó en el peligro que suponía la planta de la mesilla de noche del señor Bode. A medida que el paciente recuperaba el habla y la movilidad, la sanadora Strout lo animó a cuidar él mismo de la planta, sin saber que no era una inocente flor voladora, sino un esqueje de lazo del diablo que estranguló al señor Bode en cuanto éste, convaleciente, se acercó y lo tocó.

"Hasta el momento, San Mungo no ha podido explicar la presencia de la planta en la sala y ruega a cualquier mago o bruja que tenga alguna información que se ponga en contacto con el hospital."

Fruncí el ceño.

En los días posteriores, la noticia de que Hagrid estaba en periodo de prueba se extendió por el colegio pero nadie se disgustaba.De hecho, algunos estudiantes, entre los que destacaba Draco, parecían contentísimos.

—¡Claire! —me llamó una voz alegre por detrás. Volteé y vi a Luna con Ginny, ambas tomadas de la mano— ¡Espera!

—Ah, hola—exclamé tranquila y la saludé agitando la mano mientras en la otra llevaba el ejemplar de Quidditch a través de los tiempos que debia devolver a la biblioteca.

—Lindas pulseras —comentó Ginny cuando vió mi mano agitarse en el aire. Me observó de arriba hacia abajo con una mirada curiosa analizando cada parte de mí.

—Gracias, Weasley —agradecí amablemente sin hacer ningún gesto mientras la observaba de igual manera— Me las ha obsequiado Philip.

—Toma, Claire —dijo Luna de repente sacando de su túnica un collar hecho de corchos de cerveza de mantequilla— A Ginny ya le he dado un amuleto anti-nargles hace un tiempo. Este es el tuyo.

Lo tomé.

—Oh, vaya, es estupendo —lo admiré alzandolo a la altura de mis ojos.

Luna sonrió.

—Supongo que nada se me perderá ahora, ¿cierto? —Luna negó— Perfecto. Lo tendré conmigo todo el tiempo para evitar a los nargles... Bien, si no les importa acompañarme a la biblioteca a dejar este libro, —les enseñé el ejemplar— adelante.

Las dos chicas comenzaron a caminar, Ginny al lado de Luna y Luna a mi lado. Cuando entramos a la biblioteca y dejé el ejemplar en su lugar, Ginny retomó la palabra.

—¿Cómo haces para sobrevivir siendo la única chica del equipo de Slytherin?

—No les presto atención —dije en un susurro para no molestar a la señora Pince que habia oido a Ginny y habia soltado un quejido—. Creen que por que soy mujer soy débil y es simplemente estúpido, ¿no crees?