Un Nuevo Mito

Una Nueva Cultura

  Observarnos a nosotros mismos, e interactuar con nosotros mismos, es el comienzo.
  Pero es cuando caminamos por el mundo, que nuestras filosofías se ponen a prueba.
  Caminando entre caminantes, en el ecosistema de la pluralidad y democracia, las filosofías interactúan, se unen, se contrastan, luchan, mueren y resurgen.
  Se corroboran, replican, expanden y finalmente forman a la Cultura.
  Vosotros, mis próximos:
  ¿No habéis implementado nuevas filosofías?
  ¡Poned a prueba legítimas contrastabilidades, corroborabilidades y falceabilidades!
  Consensuad las reglas, y en ellas luchad con dientes y garras.
  En la marcha de nuestras vidas sociales, nuestros mundos internos se manifiestan a otros; todos listos para enriquecer el nuestro; algunos diferentes y hasta opuestos, y otros similares y convergentes.
  Y en nuestros encuentros diremos:
  Hermano; tú y yo compartimos este paradigma de ciencia, ¡desarrollémosla!, concibamos nuevas teorías y contrastémoslas.
  Hermano; tú y yo vemos los fundamentos universales que hacen a las espiritualidades, ¡erijamos nuevos santuarios!
  Tracemos eficientes y variados caminos hacia la exaltación, elevación y evolución de los hombres y la construcción del Ser Humanidad.
  Hermano; tú y yo hemos descubierto los fines detrás de nuestras universales emociones.
  ¡Edifiquemos nuevos embalses para recuperar y reorientar nuestras energías!, ¡y en ellas dar nacimiento a desbordantes generaciones!
  Tú y yo, hermano; levantemos nuevos edificios, nuevas y variadas artes que reflejen nuestra filosofía; y que enciendan más filosofías en los demás.
  Y nuestra abierta filosofía; convertida en abierta cultura, echada a andar se tornará más abierta aún; más rica y al mismo tiempo más humilde. Siendo adoptada y enriquecida por más y más personas, y más y más regiones.
  Tú y yo, hermano, veremos y diremos: ¡cuán cercano es el tiempo de la autoelevación de la Humanidad, pues de pie estamos, ¡y solo necesitamos marchar!