Bienaventurada tu marcha, ciudadano; en el ondear de tu bandera se mantiene la promesa de la Vida. La promesa, consciente o no, de adaptarse, evolucionar y avanzar; avanzar y desafiar todas las posibilidades.
Bienaventurada tu estructura, ciudadano; diseño de infinitos y anónimos creadores.
¡Y bienaventurada tu herencia!, fruto de una igual cantidad de progenitores.
Porque has firmado los diseños de nuevos y poderosos seres; que lograrán lo inimaginable.
Estás creando, ciudadano, en la misma forma que te recreas a ti mismo, paso a paso los progenitores de nuevas dinastías de seres.
Cada institución que afirmas, es partera que prepara al Ser Humanidad.
Cada nueva conducta, individual o colectiva; grande o pequeña, es como ladrillos y columnas, que lentamente remodelan el gran edificio de la sociedad.
El movimiento madurará y avanzará, despertando a nuevas etapas.
Y llegado el momento, cuando el pueblo y la cultura estén listos; en ese momento se nos abrirá la matriz definitiva, que dará a luz una nueva Era.
Entonces ciudadano, será momento de que erijas la institución para su fecundación.
La promesa de la vida se convertirá en proclama. Y el movimiento se organizará en cuadros y columnas, que avanzarán y lucharán por el terreno político hacia la conquista y democratización de esa fértil matriz.
La humanización de los gobiernos, y en ello la estampa de nuevos y poderosos cromosomas.
En ese instante, luego de Eones de lucha, un nuevo tipo de ser vivo habrá sido engendrado.
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Un Nuevo Mito
PoesíaCamínate a ti mismo, y verás cómo la Humanidad se levanta y camina contigo