Libres (Sukuna)

18

/Itadori/

Entro a la habitación y veo a Lilith durmiendo, la ropa y el pelo me gotea pero aún así me quedo unos segundos mirándola. Al menos ella ha podido quedarse aquí y no ver lo que ocurrió hoy, me siento desanimado por eso, incluso si no fui yo quien asesinó a esas personas, las lastimé.

-¿Ya estás de sentimental de nuevo?-dice la voz saliendo a mi mejilla-es repugnante estar en tu cuerpo cuando te pones así.

*Eres libre de irte cuando quieras-digo molesto pero en susurro.

-Si pudiera lo haría, mocoso-contesta de la misma forma, voy hasta la ducha para que el agua caliente me ayude a entrar en calor.

*Por cierto, ¿por qué ya no te molesta que esté lejos de nosotros?-pregunto para distraer mi mente y alejarla de lo que sucedió en el cine.

-La chica con la que se hizo amiga quería ir a verla al templo y si era así la descubrirían además quiere entrenar para ir al infierno-dice molesto, sonrío-¿qué te parece tan divertido?-gruñe.

*Me divierte que ella sea capaz de lidear contigo de esa forma-digo sin pensar.

-Bueno...me ofrece cosas bastante interesantes-responde satisfecho, su respuesta me molesta y eso lo hace reír-no estés jugando conmigo, mocoso porque perderás.

Idiota.

Pienso enojado,  cuando tengo puesto el pijama entro a la cama despacio pero aun así ella se despierta y me mira asustada, al reconocerme sonríe.

*Lo siento, no quería despertarte-me disculpo, ella niega e intenta limpiarse los ojos.

*Esta bien, estaba intentando esperar a que llegaran-comenta-pero me dormí-sonrío enternecido-¿cómo les fue?-el malestar vuelve y ella lo nota porque se sienta en la cama atenta.

*Fuimos al cine donde atacaron y encontramos maldiciones-respondo pero ella se me queda viendo como esperando más información-no eran maldiciones como tal, eran personas-sus ojos se congelan y me siento mal por compartir este tipo de cosas con ellas.

*Lo siento-se disculpa, frunzo el ceño-sé que...bueno por lo que veo te afecta y lamento que tuvieras que ver eso.

*No quería lastimarlos-reconozco-no quiero pasar ciertas barreras, me asusta la idea de que nada me detendrá mañana si las paso.

*Eres muy bueno, Itadori-dice suspirando enternecida, la miro pero ella está mirando por la ventana-alguien con tu corazón no podría perder el control o la cabeza al cruzar una barrera pero si te sirve de consuelo estaré a tu lado mucho tiempo para impedirte perder la cabeza-sonrío.

*Gracias-ella me mira nuevamente-¿crees que soy muy patético por pensar así?-niega.

*Es agradable estar con alguien así, aunque llegado el momento si debo lastimar a otros para protegerlos, lo haré.

-¿También a mi?-pregunta la boca apareciendo en mi mejilla.

*Contigo no tengo mucha opción-responde molesta, frunzo el ceño.

*¿Por qué no?-aprieta los labios y se acuesta.

*Es mejor dormir-dice ella dándome la espalda-es tarde y necesitas descansar para lo que sea que te hagan hacer mañana-se tapa hasta la cabeza.

-No quería arruinar su momento de amistad-dice Sukuna divertido, ruedo los ojos.

*A dormir-digo y me acuesto cerrando los ojos para descansar.

El ambiente dentro del auto era incomodo pero estar a solas con Lilith que pelea contra Sukuna sin importarle que estamos buscando a la pequeña maldición que se escapo es muy extraño.