43

757 93 20
                                    

/Lilith/

Muevo la flor entre mis dedos de forma suave para no dañarla, mientras mi cabeza va hasta la cena una y otra vez, a lo que hablamos y a su risa. Estar en ese lugar por alguna razón era agradable, no me sentía fuera de lugar o extraña. Se sentía cómodo, cálido y seguro.

El lugar más peligroso se sentía seguro.

Estoy tan mal de la cabeza que quería quedarme ahí por más tiempo.

Quizás fue la comida y el baño.

Hace mucho tiempo que no tenía tanto, y sólo cuando volví me sentí culpable. Yo comí hasta no poder más y tomé un baño largo y caliente mientras Ara estaba buscando comida para nosotros.

Escucho los pasos de Ara tras de mí, sus brazos pronto me rodean y siento mi cuerpo tensarse.

*¿Me extrañaste?

La respuesta grita en mi cabeza y tengo que poner todo de mi para ser capaz de no decirlo.

No.

De hecho tuve unos días bastante buenos con las maldiciones, una me dio flores y la otra me alimentó a cambio de información.

*¿Qué tal te fue?-pregunto volteándome para intentar alejarme de él.

*Mejor de lo que pensaba-dice satisfecho-¿Qué tal tú?

*Estuvo bien-confieso-encontré un lago-su sonrisa desaparece y me preparo mentalmente para lo que viene.

*Te he dicho que no me gusta que salgas sola-dice serio, ruedo los ojos internamente-es peligroso para ti.

*Es el mismo peligro que corres tú saliendo por cuenta propia-respondo sin ganas.

*Es distinto, yo soy hombre y tengo que hacerlo-aprieto los labios-sabes que las maldiciones están por todas partes y no van a dudar en matarte.

La risa de Sukuna vuelve a mi, su rostro mientras bebía y la forma en la que me escuchaba mientras le daba información que quería.

No sé de qué le va a servir tanta información de mi viaje.

Yo también creía que iba a matarme, pero todo lo que hizo fue portarse algo orgulloso y burlón conmigo.

No tiene sentido.

¿Por qué quería saber tanto sobre lo que hice desde que todo comenzó? ¿por qué quería escuchar de Ara? ¿De lo que he visto?

*Lilith-llama serio.

*Da igual-digo sin ganas-pensé que querrías darte un baño, es agua limpia.

*Dime que no te diste un baño-dice suspirando molesto-por favor, Lilith, dime que no lo hiciste.

*Ya basta, Ara-me quejo e intento alejarme pero toma mi muñeca y tira de mi, su otra mano toma mi mentón con fuerza.

*No entiendes, Lilith-sisea-las maldiciones son...

*Ya te escuché-digo molesta, tomo su mano para quitarla-sólo fue un baño y ya, nada malo pasó-su mano aprieta más mi mandíbula y se acerca-no-pido pero él pega sus labios a los míos.

Él se detuvo...Sukuna, se detuvo.

Ara mira el lago inseguro pero cuando sus dedos tocan el agua sonríe, se quita la ropa y yo me volteo rápido.

*Entra conmigo-dice, niego.

*Es más seguro si uno está atento y listo para defender-digo y levanto la daga, escucho su cuerpo entrar al agua.

Libres (Sukuna)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora