Libres (Sukuna)

28

/Lilith/

La noche es muy oscura, muevo lentamente la cortina y la luz de la luna entra al lugar.

Miro a mi alrededor y veo a Nobara a un lado de Maki, la primera suelta un ronquido suave y mantiene la boca levemente abierta, la segunda tiene el ceño fruncido.

Mi vista vuelve al exterior y la calma del lugar me pone algo nerviosa, no he podido dormir nada y todo lo que ronda es mi cabeza es la chica de cabello blanco que apareció ante mi y las palabras de Sukuna.

Llevo mi mano al hombro y más allá hasta sentir el inicio de la cicatriz en mi nuca, cierro los ojos imitando a la maldición pero a diferencia de él no logro sentir nada.

-Esto te lo lanzaron.

El recuerdo que vi mientras hacia mi ritual solo se veía como el rayo me impactaba pero no había nadie cerca, sólo Hiro y por su castigo apenas pudo acercarse. Cierro los ojos con fuerza y la imagen de la chica vuelve a aparecer.

-Destrúyelos...ódialos...te darán la espalda...

¿Por qué no podía decirme a qué se refería? ¿Quién era? no parecía una sacerdotisa, su alma al menos no se sentía como la nuestra, de hecho su alma expulsaba un poder superior a cualquiera que conociera, está por sobre Kanat y Hiro. Los relámpagos la rodeaban...¿habrá sido ella? pero ¿por qué? si quisiera deshacerse de mi tuvo una oportunidad para hacerlo y no es como si alguien realmente pudiera evitárselo.

¿Por qué?

El sol poco a poco va aclarando todo y me siento muy cansada, no pude dormir nada porque mi cabeza era incapaz de tranquilizarse lo suficiente. Además la cama se sentía incomoda y tengo los pies y manos fríos.

Debo ir con Kanat

Necesito respuestas o no podré estar tranquila, necesito saber qué es lo que pasó antes, de las sacerdotisas, de Hiro, quizás sólo necesito volver a oír la voz fría y critica de un sacerdote para intentar imitar ese comportamiento.

Mis emociones ya están a simple vista y he dejado de reprocharme por ellas, no sólo he besado a Sukuna o Itadori por una situación necesaria, ahora también lo disfruto. He comenzado a querer ese contacto físico y sentimental, he comenzado a observarlos más, incluso si no veo a Sukuna de la misma forma que a Itadori, su cara se detalla en mi cabeza sin problemas, y no sólo su cara, sus manos, puedo escuchar su risa burlona y puedo ver la mirada orgullosa que aunque sigue irritándome ahora...

*Buenos días-dice Nobara somnolienta, me volteo y la veo con algunos pelos de punta, se limpia los ojos y me mira frunciendo el ceño-te ves horrible-suelto una risa

*No pude dormir nada-reconozco, ella sonríe coqueta

*¿Extrañaste a tus novios?-ruedo los ojos pero me sonrojo

Ayer les conté lo que pasaba entre los 3, Maki y Nobara parecían algo disgustadas al principio, no sé bien si era por su aversión a las maldiciones o el hecho de que todo se basa en un hechizo donde hay que beber la sangre del otro. 

*Es mejor comenzar a arreglarnos-dice Nobara emocionada recordando lo que haremos hoy.

Además de quedarnos juntas, Nobara nos arrastro a Maki y a mi a comprar ropa. En primer lugar era solo para el juego de hoy pero le bastó ver la primera tienda para emocionarse y comprar más de lo debido.

Me acomodo el cinturón en la cintura y salgo del baño para verlas sentadas en la cama acomodando su uniforme. Las tres vamos muy parecidas, la única diferencia es que ellas llevan short y yo jeans pero los colores y tela son los mismos.