La investigación continuaba parada. Por mucho que analizaran los datos, no encontraban ningún hilo del que tirar. Era como si después de lo de Misa todo se hubiera disipado haciendo a Kira aún más inaccesible de lo que había parecido hasta ese momento.
Noa entró en la sala de operaciones un lunes por la mañana. Iba cargada con la mochila de la universidad.
-Oye, lo siento mucho. Necesito salir de aquí. Tengo que ir a entregar la renovación de mi beca a la universidad. Sino entrego los papeles me la quitarán.
Los policías se volvieron hacia la chica.
-Pero Noa- Dijo Aizawa- Sabes que tienes prohibido salir del cuartel.
La joven se encogió de hombros.
-Bueno, pues acompañadme alguno, así me vigiláis. Pero necesito la beca, o tendré que dejar la universidad.
Ryuzaki suspiró y se puso de pie.
-Ya voy yo.
Matsuda le miró.
- ¿Seguro?
-Si, me quedo más tranquilo.
Ninguno contestó, pero fue casi como si dijera que no se fiaba de ellos. Últimamente el detective tenía un humor de perros.
Noa suspiró y se encaminó hacia la salida.
-Vamos pues, conduzco yo.
Ryuzaki y Noa atravesaban el patio de la facultad en completo silencio. La relación entre ellos seguía siendo bastante tensa, especialmente por el lado del detective, que parecía incapaz de iniciar una conversación normal con la joven. Los acontecimientos recientes seguían haciendo mella en su cabeza, sin que pudiera apartarlos.
En ese momento se escuchó una exclamación de alegría, y Noa fue placada por el abrazo de dos chicas jóvenes.
La muchacha se separó como pudo de los brazos que la agarraban y vio que eran Sara y Ana, sus amigas. La chica soltó un gritó de emoción y volvió a abrazarlas.
- ¿Pero qué hacéis aquí?
- ¡Joe! -Dijo Ana. - ¡Ni que no te alegraras de vernos!
- ¡No! ¡No es eso! ¡Es que estoy flipando!
-Pues espera-Dijo Sara, señalando a su espalda.
Noa se giró y se encontró con sus padres y su hermano pequeño que, aunque era un par de años menor que ella, le sacaba dos cabezas de altura.
Los ojos de la chica brillaron y se lanzó a los brazos de sus familiares, llorando. Su madre la abrazaba con fuerza, mientras que su padre le daba palmaditas en la espalda, y su hermano se reía, alegre.
Sara y Ana se giraron hacia Ryuzaki, intrigadas. El detective se había apartado un poco del bullicio, pero observaba la escena con interés.
Noa se separó de ellos y los miró a todos, sorprendida.
- ¿Pero qué hacéis aquí?
-Noa, si es que tienes todo el día el teléfono apagado. Te llevamos llamando toda la mañana- Le espetó su madre.
La chica despegó los labios y sacó el móvil del bolsillo. Cierto, a veces cuando estaba en el cuartel lo apagaba, y debido a la tensión de tener que ir con Ryuzaki ni siquiera lo había encendido para escuchar música.
-Os dije que estaría por la facultad. Si es una empollona- Dijo Ana, sacándole la lengua.
-Oye...-Replicó Noa, con una sonrisa.
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Death Note: Kerosene (L Lawliet x OC -COMPLETA)
FanfictionCuando un Segundo Kira entra en escena, L empezará a sospechar de una alumna de intercambio relacionada con el entorno de Light, por lo que no dudará en acercarse a ella en busca de pruebas para atraparla. Sin embargo, esa joven aparentemente dulce...