51.- Primera prueba

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Ya cambiados, se nos reunió a todos los aspirantes en una enorme sala. Al frente de esta, una pantalla gigante, un escenario y una mesa sobre este, en la cual se situaba un hombre enjuto.

- ¡Hay muchísima gente...! - observó Midoriya.

- ¡Ya veo! - exclamó Uraraka.

- Me estoy agobiando... - susurré.

El examinador principal nos explicó las normas del examen, al igual que, de 1540 participantes, solo pasarían los 100 primeros a la siguiente prueba. Las paredes de la sala se abrieron, dando lugar a un enorme estadio, el cual parecía estar dividido en distintos sectores, rodeado por gradas. Nos repartieron los tres sensores y las seis pelotas correspondientes a cada uno. Coloqué mis sensores en mi hombro, en el abdomen y en el cinto de mi traje.

- ¡Chicos, creo que deberíamos tratar de agruparnos y movernos en conjunto! - propuso Midoriya.

- Ni de coña, esto no es un picnic escolar - dijo Bakugo antes de irse.

- ¡Vuelve aquí, idiota! - exclamó Kirishima mientras empezaba a perseguirlo, para ser también seguido por Kaminari.

- Yo también me marcho. No puedo hacer buen uso de mi kosei si estamos todos juntos - añadió Todoroki.

- ¡Todoroki! - lo llamó Midoriya.

- ¡No hay tiempo, Midoriya! - le avisó Mineta - ¡Vámonos!

- Creo que yo también iré sola - comenté, y me fui en otra dirección.

- ¡Himura! - me gritó Ashido, pero hice caso omiso.

Me alejé de allí, pero no tardaron mucho en rodearme 5 chicos.

- ¡Mirad qué suerte! - comentó uno - ¡Una alumna de la UA!

- ¡Encima es la ganadora del Festival Deportivo! ¡Y una Himura, por si fuera poco! - añadió otro.

- Si la descalificamos, estaremos en boca de toda la escuela - rió otro.

La cuenta atrás empezó a sonar.

- ¡4!

- ¿De verdad? ¿5 contra 1? Es algo injusto... - suspiré.

- ¡3!

- ¿Qué pasa? ¿Acaso nos tienes miedo? - preguntó otro.

- ¡2!

- No, que va. Si lo digo por vosotros.

- ¿¡De qué hablas, niñata!? - me gritó el último.

- ¡1!

- Habéis hecho una muy mala elección viniendo a por mí - respondí.

- ¡Empezad!

Activé mi kosei, empecé a correr y toqué todos sus sensores con una sola pelota, uno por uno.

- ¡Increíble! - se oyó por la megafonía - ¡La primera candidata acaba de pasar el examen!

- Bueno, chavales, yo me marcho - comenté al frenar - Ya he terminado aquí...

Ellos me miraron, sorprendidos al ver que mis sensores estaban iluminados, y luego miraron sus propios sensores, en rojo.

- "Los que han pasado la prueba deben dirigirse a la sala de espera" - se escuchó salir de mis sensores.

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