Valentina y Rafael se fueron al departamento de ella para que estuviera más cómoda, aunque ella decía que se sentía bien todavía se sentía algo mareada y con un poco de náuseas, Rafael podía notar que se sentía algo mal así que la ayudo a llegar a la sala donde ella se acomodo, se quedaron platicando un rato hasta que la noche cayó, ella le dijo que fueran a su cuarto pues habían quedado que se quedarían juntos
R: Te vez preciosa con ese vestido, te queda perfecto -dándole un beso- no sabes lo mucho que me encantas Valentina
V: Vamos a mi cuarto -sonriendole- pícaramente-
R: No guapa, tu necesitas descansar
V: Yo te necesito a ti
Ella tomo la iniciativa y beso a Rafael, solo un beso fue suficiente para decirse lo mucho que se necesitaban, pareciera que sus cuerpos eran engranajes diseñados para encajar el uno con el otro, rápidamente Valentina le quitó la camisa a Rafael dándole besos por todo su pecho provocando que el calor aumentará, el le tomo el trasero y le dio un apretón haciendo que ella le sonriera
R: Todo esto es mío así como todo yo soy tuyo -sonriendole-
De un ágil movimiento Rafael despojo de aquel vestido a Valentina dejándola solo en aquel conjunto de encaje rojo que la hacía lucir extremadamente sexy, el estaba fascinado con ella pues pareciera que cada parte fue tallada a mano. El la pego más a el y empezó a besarle el cuello, la llevo al sillón donde la recostó, ahí empezó a besarle todo el cuerpo haciendo que ella dejará escapar algunos gemidos apenas audibles, los dos estaban dando rienda al placer que los albergaba al sentir sus pieles desnudas, recorrieron todas las formas de darse placer antes de llegar a la cúspide de este, luego de varios toques, roces y pasión Valentina introdujo el miembro de Rafael en su interior provocándoles un gran placer, con cada embestida un gemido sonaba con cada vez más intensidad, algunos eran reprimidos con besos, cada vez se sentían más cerca del orgasmo haciendo que disfrutarán de cada minuto, las respiraciones agitadas, los gemidos y las pocas palabras que cruzaban inundaban aquella habitación, los dos estaban excitados a mas no poder, los dos llegaron al orgasmo máximo juntos haciendo que Valentina soltara un pequeño grito, Rafael le regalo unas cuantas embestidas mas antes de salir de ella, cuando lo hizo se recostó a su lado dejando que el único ruido que se escuchara fueran sus respiraciones aun agitadas, Valentina viro su cuerpo hacia Rafael reglándole una sonrisa cansada provocando que el hiciera lo mismo, le dio un beso en la frente y la acerco a su cuerpo, no eran necesarias las palabras puesto que unos momentos antes se habían expresado todo, sus cuerpos habían hablado por ellos haciendo que no quedara ninguna duda que lo que sentían. Rafael acariciaba la espalda desnuda de Valentina hasta que ella se quedo dormida, el la volteo a ver, un rayo de la luna alumbraba su cara a, su boca estaba entre abierta haciendo que el sintiera su respiración, sus largas y oscuras pestañas hacían sombra sobre mejillas que aun se encontraban sonrojadas, el se limito a sonreír, no sabia como se había enamorado de tal manera en tan poco tiempo, nunca había visto a una mujer tan hermosa como ella pero mas allá de eso lo había enamorado su hermoso corazón y la belleza de su alma, mientas contemplaba a Valentina el sueño lo venció y así llego un nuevo día. Esa ocasión Valentina se despertó mas temprano que el, con cuidado de deshizo se su abrazo, se puso la ropa y salio a hacer algo de desayuno, cuando estuvo listo lo llevo a la cama donde el seguia dormido, ella se acerco y le dio un tierno beso haciendo que el se despertara
R: Buenos días preciosa mia -sonriendole-
V: Buenos días guapo -dandole un beso- te traje esto para que desayunemos y nos vallamos a la empresa
R: Está bien -sonriendole- vamos a desayunar y nos vamos guapa
Ellos así lo hicieron, después de desayunar se dieron un baño rápido y se arreglaron, ella se puso una falda estilo tubo que le quedaba un poco más arriba de la rodilla y una blusa de vestir en color azul claro cruzada, se dejó el cabello al natural y se maquillo mientras que Rafael se puso un pantalón ajustado en color beige con una camisa color rosa con un saco en color beige, cuando estuvieron listos salieron hacia la oficina, en el camino Valentina iba cantando a lo que Rafael solo la miraba y sonreía, antes de llegar a la empresa una llamada los interrumpió
V: ¿Bueno?
¿?: ¿Hablo con la señorita Hartman?
V: Si, ¿Que necesita?
E: excelente, hablo del hospital del bosque para informarle que los resultados de los análisis que le realizaron ayer ya están listos así que puede pasar a recogerlos cuando guste
V: Muchas gracias -colgando-
R: ¿Quién era preciosa?
V: la enfermera del hospital diciéndome que ya están los resultados de los análisis para recogerlos
R: Muy bien, ahorita mismo vamos por ellos -sonriendole-
Ellos se desviaron del camino y llegaron al hospital
V: Buenos días señorita, vengo por unos estudios a nombre de Valentina Hartman
E: Muy bien, aquí están sus estudios señorita, el doctor me dijo que todo está en perfectas condiciones excepto uno que otro valor que está un poco más bajo, no sé si pueda venir mañana para que el doctor le expliqué exactamente el tratamiento
V: Si claro, ¿La cita la hago con usted?
E: Si, ¿Puede mañana a las 2?
V; Está perfecto, muchas gracias -sonriendo-
Ellos se fueron a la oficina donde las secretarias la recibieron de una manera muy especial
S: Licenciada supimos lo que le pasó ayer entonces nosotros nos encargamos de todo -sonriendole- y por cierto, muchas felicidades a los dos -abrazandoles-
V: ¿Felicidades?
S: Claro licenciada, un bebé siempre es una bendición -sonriendole-
Continuará....
ESTÁS LEYENDO
Las dos caras de una sola mujer
FanfictionValentina, una mujer de 28 años con una vida aparentemente perfecta, comprometida con un empresario, reconocida por los demás por su gran belleza y ternura acompañada de su enorme amabilidad, la vida le jugó en contra desde su niñez dejando heridas...