Las dos caras de una sola mujer

Capítulo 51

Unas horas pasaron desde aquel encuentro entre ellos, Valentina se encontraba dormida sobre el pecho de Rafael mientras el velaba su sueños, fue entonces cuando recordó que fue tanto su deseo que olvidó protegerse, lo mismo había pasado un par de veces antes solo que en esta ocasión una extraña sensación lo invadió ¿Sería posible que Valentina quedará embarazada? No, ella misma le había dicho que era muy difícil que quedará embarazada, además el momento no era el más adecuado, aunque le había dicho a Valentina que no le importaban los hijos que pudiesen tener muy dentro de su ser soñaba y anhelaba ver a Valentina cargando a un hijo suyo en su vientre.

El estaba inmerso en sus pensamientos cuando sintió que Valentina empezaba a despertar, ella abrió los ojos y el le sonrió para después darle un beso en la frente

R: Hola guapa -sonriendole- ¿Descansaste?

V: Como nunca -sonriendole- en tus brazos me siento tan segura -acercándose más a su cara- fue increíble Rafa, como cada vez que estoy contigo

R: Si mi amor, fue increíble -acariciandole la cara- ¿Te puedo preguntar algo?

V: Claro -sonriendole-

R: Independientemente de lo que pasó hace unos años, ¿A ti te gustaría tener hijos?

V: La verdad no sé que responderte, antes de lo que pasó con Camilo si tenía o no hijos no era algo que me importara pues sabía que cualquiera de las decisión que tomara sería por lo que estaba viviendo, y ahora es diferente, se que es casi imposible quedar embarazada y aunque al principio me dolió ahora no me importa mucho, te tengo a ti y eso es lo que importa -dándole un beso- pero si las circunstancias fueran distintas claro que tendría hijos contigo obviamente en un futuro, ya que estuviéramos casados

R: Tienes razón amor, nos tenemos a nosotros y eso es lo importante -dándole un beso- ¿Quieres ir a comer algo?

V: Me encantaría

Valentina y Rafael se dieron un baño rápido, la noche ya había caído decidieron salir a algún a bailar, Valentina llevaba un vestido corto y suelto con estampado de pequeñas margaritas, de maquillo muy poco y estaba lista, Rafael llevaba unos jeans en color crema con una camisa azul y unos zapatos café, ya listos salieron hacia un lugar que les recomendaron en el hotel, en esa ocasión Valentina era la que iba manejando, Rafael llevaba la mano en el muslo de ella

R: Mi amor, esta semana aparte de descansar nos va a servir para acomodar todo en nuestra vida, lo peor ya pasó, ahora solo es cosa de seguir tu tratamiento y todo estará bien

V: Se que así será -sonriendole- Quiero hacer las cosas bien y seguirlas para que todo fluya

R: Y lo vas a lograr guapa -dándole un beso-

V: Rafael, te amo

R: Y yo a ti mi vida

Valentina en realidad creía lo que estaba diciendo, cuando regresarán a la ciudad quería reacomodar todo en su vida aceptando lo que tenía y aprendiendo a vivir con ello, quería ser feliz al lado de su amado y sabía que lo iba a ligar pues finalmente se había dado cuenta que ella merecía ser feliz, tal y como lo dijo Rafael lo peor ya había pasado así que no sería tan difícil serlo ¿O si?

Siguieron su camino y unos minutos después ya estaban frente a aquel lugar, desde afuera se escuchaba la música

V: Hoy es nuestra noche

Valentina le sonrió y le tomo la mano para adentrarse en aquel lugar, al llegar los dos ordenaron un par de bebidas y algo para cenar

R: No te lo había dicho pero te vez preciosa -dandole un beso-

V: Y tú eres el más guapo -sonriendole-

Ellos comieron algo ligero y se dirigieron a la pista, tal y como cuando empezaron a salir empezaron a bailar, de vez en cuanto compartían besos, bailaron varias canciones de diferentes ritmos, la gente que había al rededor los observaba pues sus cuerpo encajaban a la perfección, como la primera vez sus almas se reconocieron.

Luego de varias canciones regresaron a la mesa a seguir tomando y así pasaron la noche hasta el inicio de la madrugada, ninguno de los dos habían bebido lo siguiente como para estar borrachos así que manejaron hasta el hotel y se dirigieron hacia su hotel, llegaron a su habitación y se metieron a la cama

V: Me la pasé increíble contigo -acariciandole la cara- Extrañaba salir a bailar

R: Yo también Vale, me encanta como bailas, me encantas toda tu -dijo dándole un beso- y eso solo es el principio de este viaje, quiero que este momento sea un antes y después de nuestras vidas y empezar juntos a ser felices -dándole otro beso:

V: Así va a ser mientras estemos juntos -sonriéndole- Sabes, me quedé pensando en lo que me preguntaste en la mañana, ¿Tú quieres tener hijos?

R: No, bueno si -riendo- Mira, ahorita lo que me importa es que tú estés bien y disfrutar la vida contigo, antes pensaba que la vida no estaba completa hasta que no tuvieras una familia propia pero tú eres mi familia, el amor de mi vida, igual en algún futuro algo lejano y si tú quieres podríamos intentar tener un bebé, ver las opciones y si no no pasa nada, ya te lo dije, yo te elegí a ti, solo a ti, a estas alturas los hijos no me importan -dándole un beso-

V: Eres perfecto -sonriendole-

Los dos platicaron un rato más compartiendo besos y cariños hasta que el sueño los venció, a la mañana siguiente Valentina estaba dormida mientras Rafael la abrazaba por la espalda, la luz del brillante sol entraba por la ventana, Rafael empezó a despertar y unos minutos después llamaron a la puerta así que el se levantó a abrir pues seguramente era el room service a llevar el desayuno que había pedido el día anterior

R...

Continuará...