Las dos caras de una sola mujer

Capítulo 77

Después de esa noche los días se les pasaron volando mientras disfrutaban de su burbuja de amor, tanto así que ya había pasado casi una semana, era un viernes por la mañana Valentina se estaba despertando como acostumbraba en el pecho de Rafael, el seguía dormido así que le dio un beso y se deshizo de su agarre dejándolo dormido, se puso la bata y bajó a la cocina para preparar algo de desayunar, pico un poco de fruta y sirvió yogurt, hizo algo de jugo de naranja y subió al cuarto con todo en una mesita, la puso sobre la cama y se acercó a despertar a Rafael, se acercó con cuidado a su rostro y lo acarició con su nariz para luego depositar un suave beso en su boca

V: Buenos días amor, ya es hora de levantarnos

Rafael empezó a despertar y cuando lo hizo por completo se medio sentó en la cama, tomo a Vale por la cintura y la puso en su regazo

R: Buenos días mi bella esposa -el le dio un beso en el cuello- ¿Cómo dormiste?

V: Muy bien -sonriendole- mira lo que te traje

R: Eres maravillosa -le dio un beso- vamos a desayunar para arreglarnos si

Valentina asintió y al querer pararse de sus piernas el la volvió a acomodar ahora bajando su cara al vientre de ella

R: Buenos días muñeca, te amamos corazón

Rafael hacia eso todas las mañanas mientras Valentina le llenaba verlo tan emocionado con la llegada de su pequeña, a pesar de que el miedo en ella a veces la atacaba ya amaba a ese ser con su vida y anhelaba tenerla entre sus brazos, en realidad le aterraba pensar más a futuro pero quería disfrutar cada momento.

Así los dos desayunaron y después se fueron a arreglar, Valentina eligió un vestido en color rojo vino corto, este era ajustado al cuerpo dejando a la vista las curvas que poseía, lo acompañó con unos tacones negros y una chaqueta en el mismo color, se maquilló como acostumbraba resaltando sus labios con un labial en rojo también, en el cabello solo se lo ondulo un poco y lo dejo suelto y ya estaba lista, Rafael se pudo un pantalón de vestir en color gris y una camisa en color negro y de igual manera quedó listo, ya listos salieron rumbo a la empresa, ese día Valentina ya no tenía ninguna cita fuera de la empresa así que estaría en su oficina revisando distintas cosas, al llegar como siempre los recibieron con mucho gusto

S: Buenos días licenciada, la esperan en su oficina

V: Okay, muchas gracias

Los dos siguieron su camino hacia la oficina de Valentina

R: Bueno pequeña, aquí nos separamos, la veo al rato licenciada Hartman

V: Licenciada Cervantes -sonrió- ¿Comemos juntos?

R: Sabes que si -sonrió- te amo

Se dieron un beso y él se dirigió a su oficina, Valentina entro a la suya saludando a la persona que estaba ahí

V: Buenos días, disculpe la tardanza

E: Buenos días nena -le sonrió-

V: Lalo, ¿Que haces aquí? Pensé que ya te habías ido -preguntó animada- Con eso de que te vas sin avisar

E: Ya se Vale, si no te avise que me quedé fue porque toda esta semana estuve pensando todo -suspiró- tu sabes que siempre me a gustado estar de aquí para allá trabajando donde pudiera y viviendo donde quisiera pero al verte a ti tan feliz con Rafael, enamorada hasta los huesos y con esa felicidad inmensa de esperar un hijo junto al hombre que amas me hizo desear lo mismo, quiero encontrar a alguien con quién pueda compartir mi vida y para poder lograrlo necesito estar en un lugar fijo, lo he estado pensando desde antes pero eso fue lo que detonó todo eso fue el motivo por el que te propuse el proyecto, por eso mismo me pienso quedar aquí al menos dos meses en lo que veo y acomodo bien todo, si me gusta me voy a quedar aquí de fijo, tu eres mi familia y me gustaría estar cerca de ti, conocer a mi sobrina, ¿Que opinas?

V: La verdad me sorprende, tu siempre has buscado renovarte, las aventuras pero te entiendo, todos necesitamos a alguien a quien amar en nuestras vidas así que me da muchísimo gusto que te vayas a quedar aquí con nosotros -sonrió- Así que bienvenido amigo

Valentina lo abrazo y el la recibió con gusto, los dos se querían como hermanos pues cuando se conocieron fueron un apoyo el uno para el otro, el estaba feliz en ver a su amiga tan plena disfrutando del amor y ella estaba tranquila en saber que iban a estar más cerca.

Después de hablar de eso empezaron a hablar del proyecto que el le había propuesto para hacer que las dos empresas trabajarán, empezaron a armar el plan para ver qué se haría y en cuanto tiempo quedaría, así se les fue el tiempo trabajando. Rafael por su parte estaba haciendo lo mismo, trabajando y entregando distintas cosas que necesitaban hasta que su celular sonó

R: ¿Si?

F: Hola Rafael soy Fernanda

R: Hola Fernanda, ¿Todo bien?

F: No mucho, ¿Te acuerdas de los vestidos que me trajiste?

R: Si claro, me dijiste que los ibas a mandar a analizar a ver si encontrabas algo, ya se, no encontraste nada en los vestidos ¿Verdad?

F: Lamento decirte que no Rafael, esos vestidos son la prueba que necesitabamos para confirmar que Valentina mató a Jaime, necesito que vengan los dos mañana, le tenemos que decir ya a Valentina, todavía no es seguro que ella se la culpable pues los resultados del vestido con la mancha no me han llegado pero todos los demás dieron positivo a la prueba de parafina lo que significa que ella disparó un arma

R: No, deben estar equivocados, además esos vestidos no eran de ella, se los dio su mamá y dijo que los había usado una vez quizá

F: Puede ser pero ella no recuerda absolutamente nada de su otra personalidad, de todas maneras tenemos que decirle

V: ¿Decirme que Rafa?

Continuará...
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