Capítulo 43

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Rafael vio un par de veces más ese dato, le tomo una foto rápida y dejo los documentos

R: Muchas gracias oficiales, ¿Hay algo más en qué los pueda ayudar?

O: Eso sería todo, cualquier cosa que sepa avísenos por favor

R: Si, cuente con ello

Rafael bastante nervioso de la comisaría, no podía creer que esos datos coincidieran, decidió que iba a investigar por su cuenta pues de eso dependia el futuro de su amada.

Llegó a la oficina y empezó a buscar ciertas cosas que lo pudieran ayudar, fue entonces cuando se le ocurrió llamar a la doctora Fernanda y sacar cita, ella al escuchar la situación le dio una cita en la tarde, el se dirigió a la oficina de Valentina

R: Hola -dandole una media sonrisa-

V: Hola mi amor -sonriendo- no supe cuando llegaste, ¿Cómo te fue?

R: Bien -dijo nervioso- ahora sí necesito hablar contigo

V: Si, está bien

Valentina se levantó y se sentó en la silla que estaba a un lado de Rafael

R: Se que esto no va a ser fácil pero quiero que sepas que siempre voy a estar a tu lado apoyándote -tomándole la mano- Te voy a contar esto desde un principio pero necesito que me dejes hablar, ¿Okay? -Valentina asintió con la cabeza- Bueno, cuando fuimos con Fernanda al finalizar la consulta ella me mandó a llamar, ella me comentó que había ciertas cosas que le llamaban la atención en ti y me pidió que investigara, fui con Ximena y al principio no me quiso decir nada pero ayer en la noche me marco y fui a su departamento, me estuvo platicando de cosas que quizá tú no sepas

V: Espérame un poco, ¿La doctora te pidió que investigaras? ¿Que necesitabas "investigar"?

R: Necesitaba saber más sobre tu infancia, tu sabes que yo confío plenamente en ti y se que todo lo que me has contado es verdad pero tú misma me has dicho que hay cosas que no recuerdas y justo eso tenía que investigar, fue por eso que fui con Ximena y ella me contó muchas cosas -suspirando- necesito que todo lo que te diga lo tomes con calma

V: Está bien

R: Para empezar, Ximena me contó sobre la condición de tu mamá

V: ¿Condición?

R: Si, tu mamá tenía una condición psiquiátrica que podía ser heredada a una de ustedes, cuando tus papás tuvieron a Ximena le hacían estudios psiquiátricos y demás para ver qué no tuviera nada y ella está bien, a tu mamá le daba miedo tener otro hijo por la posibilidad de que lo heredará

V: Por eso siempre sentí ese rechazo hacia mi, ella no me quería tener ¿Verdad? -el asintio- Yo sabía que algo había detrás -con la voz cortada-

R; Espérame Vale, eso es solo el principio, seguí platicando con ella y me dijo que a ti también te hacían estudios y todo iba bien hasta que algo pasó que hizo que empezarás a actuar distinto, tu mamá te llevo con otro doctor, ¿No es así?

V: Si, pero el solo me dijo que tenía ansiedad, toda mi vida he tenido que tener cierto "control" con eso

R: Eso es de lo que te quiero hablar, Vale tu no solo tienes ansiedad, ese doctor te diagnóstico con transtorno de doble personalidad

V; ¿Que? -parándose- eso no puede ser posible Rafael, yo lo hubiera sabido, mi papá no hubiera sido capaz de ocultarme algo así

R: Se que es difícil de entender Vale pero esa es la realidad

V: ¿Por qué nunca me lo dijeron? -con la voz cortada- Yo debí de ser la primera en enterarme, si lo hubiera sabido no me hubiera negado a tomar los medicamentos o ir al psiquiatra

R: No se por que Vale pero el punto es que ya lo sabes y eso es lo bueno

V: Espérame

Valentina se levantó de donde estaba y se acercó a su escritorio, de ahí tomo su teléfono y marco un número

V: Ximena, necesito que vengas de inmediato a mi oficina... No me importa, ven para acá -colgando-

Pasaron un par de minutos y Ximena llegó

X: Por qué tanta urgencia Valentina -entrando- ¿Qué pasó?

V: ¿Por qué me engañaste? ¡Siempre he estado viviendo en una mentira!

X: No se de que me estás hablando Valentina

V: ¡Ya no mientas! Ya se todo Ximena

X: ¿Saber que Valentina?

V: Ya Ximena, se que todo este tiempo me has engañando, se que el diagnóstico que ustedes siempre me dijeron era una mentira, ¿Cómo fueron capaces de ocultarme algo así?

X: No Valentina, tu nunca te debiste de enterar, yo le hice esa promesa a mi mamá, todo fue culpa de Rafael

R: Entiende que ella tenía todo el derecho de saberlo

Rafael seguía discutiendo con Ximena mientras que Valentina se sentó en el sillón, eran muchas cosas que procesar

R: Vale, ¿Estas bien? -acercándose a ella?

V: No Rafael, ¿Cómo voy a estar bien cuando siempre he vivido en una mentira? No se que he hecho en gran parte de mi vida y ahora se el por qué

X: Yo no tengo nada que hacer aquí -saliendo de la oficina-

R: Vale, saque una cita con Fernanda, se que ella nos puede ayudar en todo esto -abrazándola- mi amor, yo sé que esto es difícil pero se que vamos a estar bien, esto no cambia en absoluto todo este amor que siento por ti

V: Gracias Rafa -sonriendole cabizbaja- No se ni siquiera como sentirme al respecto -suspirando- ¿Será que Jaime estaba diciendo la verdad Rafa?

R: No lo se pero eso lo resolveremos después, ahorita lo importante es atenderte

V: Es que eso no deja de darme vueltas, alguna otra vez me habían llamado Angélica, ¿Y si he hecho cosas malas Rafa?

R: Tranquila Vale, eso lo resolveremos después -dándole un beso en la frente- Mira, vamos hacia el consultorio y después resolvemos lo demás ¿Okay?

V: Okay -suspirando-

Continuará...

Hola! Bueno, se que la semana pasada los deje sin capítulos, tuve un pequeño bloqueo al no saber cómo continuar la historia, déjenme saber que les gustaría que pasará y como sería su final para está historia, muchas gracias por leerme

Las dos caras de una sola mujer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora