Adeena:
Y yo que creí que la pasaría bien por ser el cumpleaños de Helen.
La música apesta. No puedo comer algo dulce sin tener los comentarios de Zoey en la cabeza. Helen tampoco la está pasando bien. Sierra y Noah están furiosos y no se acercan al resto porque Zoey persigue a Marcus como un ratón al queso. Los padres de Marcus escuchan a gente hablar solo asintiendo porque no entienden de qué hablan. Nate sí parece pasarla bien porque habla enérgicamente con Logan y unas personas más que no conozco.
Me voy al fondo, me siento en una mesa y bebo de mi copa.
—Quiero irme —susurro para mí.
—Yo también —dice Noah sentándose a mi lado.
—Y yo —sigue Sierra a su lado.
—Ya somos cuatro —dice Helen.
Los cuatro nos quedamos con mala cara, bebiendo y en silencio.
Hasta que una idea cruza mi mente y sonrío viéndolos.
—¿Y si nos vamos? —los tres me mira confusos—. Vamos a un bar, algo tranquilo para emborracharnos, buena música y comida chatarra sin nadie que nos diga qué comer y qué no. Bailar hasta que los pies nos duelan y festejar este cumpleaños como se debe.
Los tres sonríen y asienten.
—¿No le vas a decir a Nate? —me pregunta Noah.
Veo a un lado y noto que ni se dio cuenta de mi ausencia.
—No, él la está pasando bien, déjenlo.
Salimos sigilosamente por la puerta trasera, para que nadie se interponga en nuestro camino.
Reímos cuando lo logramos, pero dejamos de hacerlo cuando escuchamos que alguien carraspea su garganta detrás de nosotros.
—Mierda —susurra Helen mientras nos volteamos y vemos a Marcus serio y cruzado de brazos viéndonos.
—¿A dónde creen que van? —pregunta y los cuatro nos miramos.
Bueno, ellos tres me miran a mí en realidad.
—Tú puedes con él —me susurra Sierra para dar la vuelta e irse con Noah.
—Distráelo —me susurra Helen dejándome sola con Marcus y esta situación.
Los veo indignada.
—¿Entonces? —volteo a ver de nuevo a Marcus y decido ser sincera.
—Nos vamos —eleva una ceja—. No la estamos pasando bien, nos aburrimos y queremos festejar el cumpleaños de Helen como a nosotros nos gusta, como se debe.
—Pueden hacerlo aquí.
—No, Marcus —doy un paso hacia él—. No es lo mismo, no es lo nuestro. Vamos a ir a un bar.
—Adeena...
—No digas nada Marcus, por favor, sólo queremos pasarla bien.
Se me queda mirando, termina asintiendo y suspiro aliviada.
—Gracias, nos vemos.
Doy media vuelta y comienzo a caminar al auto, pero veo que Marcus se pone a mi lado.
—¿Qué haces? —le pregunto confusa a la vez que me detengo.
—Voy con ustedes —dice seguro.
—Marcus...
—Tampoco la estaba pasando bien —me mira y sonríe un poco—. ¿No me dices siempre que me divierta un poco? Pues vamos.
Comienza a caminar y media anonadada, lo sigo.
Cuando llegamos al bar, todos voltean a vernos.
Es entendible, vamos súper formales a un bar.
Vamos directamente a la barra.
—Adeena —me dice el barman que ya conozco.
—¿Cómo va, Trevor?
—Bien, ¿Tú?
—Aburrida, necesitando diversión.
—Entonces estás en el lugar correcto —dice guiñándome un ojo haciéndome sonreír, lo conozco hace tiempo ya—. Estás hermosa, debo admitir.
—Gracias, estaba un poco insegura.
—No escuches a los demás —me dice Sierra.
—La gente es estúpida diría Isaac —dice Trevor y río.
—¡Eso mismo pensé yo!
—¿Cómo conoce a Isaac? —pregunta confuso Marcus viéndome, está a mi lado.
—Cuando estaba bien, lo traje aquí. Quería ir a un bar y lo traje a mi favorito.
—Recuerdo la cara de asco que hizo cuando probó la cerveza —dice Trevor y río asintiendo.
—Por poco vomita.
Trevor asiente, divertido, mientras deja tragos sobre la barra.
Miro a Marcus y está serio.
—¿Todo bien? —me mira y frunce los labios.
—¿No era que no le decías a muchos lo de Isaac?
Mis cejas se disparan hacia arriba por la sorpresa.
Veo a un lado para ver si me tiran una ayuda, pero Helen, Noah y Sierra ya se bebieron el trago y fueron a la pista a bailar.
Porque sí, la hay.
Vuelvo a verlo.
—Eeeh... lo traje porque me lo pidió y Trevor trabaja aquí y... —frunzo el ceño—. No tengo por qué darte explicaciones, Marcus.
Frunce los labios y asiente dejando de verme.
Toma el vaso y bebe el trago de una sola vez. Hago lo mismo.
—¿Vas a ir a bailar o te vas a quedar sentada toda la noche? —miro a Trevor y sonrío—. Debes ser buena persona y dejar que los demás admiren lo bella que estás.
Mis mejillas se sonrojan. Me agarro de la barra y me inclino hacia adelante, beso su mejilla y sonríe más, ignorando la mirada intensa de Marcus sobre mí me voy a la pista con los demás.
¿Qué le pasa a este ahora?
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Aroma a Libros
Romance"Si hay atracción por su alma antes de tocar su piel, es real". Ron Lorent #1 en tensión 21/05/2023 #1 en novelaromantica 27/06/2023 #1 en amoreterno 16/08/2023 Esta historia es mía, original de mi mente, no plagien y usen su imaginación. Portada h...