Aroma a Libros

Capítulo 41

31 de julio, 2020

Adeena:

—Creo que deberíamos hablar esto en persona ¿No? —la voz del padre de Isaac suena por el teléfono.

—¿Cuándo? —pregunto un poco molesta—. Ustedes no están nunca.

—Adeena —ahora es la madre—, sabemos lo importante que eres para Isaac y estamos muy agradecidos de lo que haces por él. Pero esto es algo grande e importante, aunque no creas, es nuestro hijo y lo amamos, a la propuesta no la podemos tomar a la ligera y darte un si por celular.

Suspiro sabiendo que tiene razón.

—Bien ¿Cuándo es lo más pronto que pueden venir?

Acordamos un día y corto la llamada para volver a que me terminen de maquillar para el casamiento de mis tíos.

Sólo espero que los padres acepten, al igual que Isaac. Es peligrosa la idea, pero puede que lo salve.

—¿Todo bien? —me pregunta Sierra y asiento, pero no se lo traga—. Quita todo de tu cabeza hoy, es el casamiento de Camille y Derek, olvida a Marcus, Isaac, a Nate, ya hiciste todos estos días duelo por Nate, ahora solo mantén tu cabeza en estar feliz por tus tíos.

Decido seguir su consejo y enfocarme en esto.

Cuando entramos al salón con Sierra, conozco a la mayoría, muchos hablan francés ya que vinieron al casamiento de mis tíos.

—Hola —volteo y veo a Noah junto a Marcus y Logan.

Estos dos últimos vienen juntos como siempre.

—Te cortaste el pelo, lectora.

—Ya me había crecido mucho —digo sonriendo.

—Te queda lindo —veo a Marcus por un segundo, pero solo asiento y dejo de verlo.

—Voy con Camille.

Tomo una copa de las bandejas y voy a donde está mi tía.

Ignorando a Marcus, como vengo haciendo desde que corté con Nate.

El casamiento pasó y fue algo hermoso, con Sierra y la mejor amiga de mi tía fuimos las damas de honor; Noah, el tío de Sierra y un amigo de mi tío, fueron los caballeros de honor de Derek.

Ya todos en el salón bebiendo y comiendo, acomodo la pajarita de Isaac.

—Que está bien —se queja.

—Está chueca.

Cuando lo logro y me enderezo, dos fuertes brazos me levantan del suelo haciéndome gritar de la sorpresa.

—¡Somos familia legalmente!

Río por la alegría de Noah y volteo para abrazarlo.

—Siempre fuimos familia —dice Derek llegando y abrazándome.

Nos ponemos a hablar todos, Noah, Sierra, Marcus, Logan, Isaac, Helen, los padres de Marcus y el tío de Sierra.

—Estoy demasiado contenta por ustedes —les digo tomando las manos de mi tía.

—Je suis aussi heureux pour nous deux.

Todos volteamos hacia la voz detrás nuestro.

Lleva un vestido celeste suelto que se ajusta en sus pechos, con su cabello rubio suelto y tacones.