Las series que marcaron mi infancia

Cinco materiales audiovisuales que fueron mis gustos culposos

Confieso que a mí también me han gustado algunas porquerías que, desde el punto de vista práctico, no valían la pena. Por suerte, ahora soy una persona con criterio propio y que usa el 90% de su cerebro, así que vengo a confesar mis cinco pecados.

#5: Mikan, el gato naranja

No era una mala serie, pero sí que se pasaba de simple y con una trama pobre. El problema real fue que la sobrevaloré demasiado, al punto de que quería tener un gato cuando nunca me han gustado los gatos. En mi casa tampoco les tenían amor a los felinos, así que esta serie ocasionó algunos berrinches por mi parte. En mi defensa, diré que yo era una pequeñaja de 4/5 años con gustos influenciables y fluctuantes.

#4: Flipper

Un dibujo animado al que también sobrevaloré demasiado en su momento, cuando en realidad no era la gran cosa. Tanto es así, que ya ni siquiera recuerdo bien de qué trataba. Pero igual, yo era pequeña y me conformaba con cualquier cosa que me entretuviera.

#3: Dance with devils

No sé qué fue lo que me atrajo de este anime, porque contiene todo lo que no me gusta ver en un anime: ecchi, harem y encima todo era al estilo cantaleta de musical hollywoodense. Lo peor es que, incluso años después, quise verla completa, pues originalmente solo tuve la oportunidad de encontrar tres o cuatro capítulos a lo sumo. No puedo esgrimir ninguna justificación en mi defensa, pues en esa etapa yo ya estaba bastante grandecita y bien madura. Supongo que estaba aburrida, o simplemente me atraían los chicos lindos del reparto.

#2: Avenida Brasil

Esta telenovela pertenece a la última época en la que yo aún tenía una afinidad con los dramones. Sin embargo, todo está mal con ella: ideas erróneas acerca de la vida en la pobreza extrema, supuesta “heroína” que en realidad es una vengadora, vueltas de tuerca irrespetuosas para con la inteligencia de los espectadores y redención barata de la villana principal. No sé cómo pudo gustarme, creo que la fama que tenía influyó en mí.

#1: Crepúsculo

Créanlo o no, hubo un tiempo en que estas películas llegaron a gustarme mucho. Me parece que fue más el aburrimiento que otra cosa lo que hizo que me gustaran, y también porque la fantasía me agrada y los vampiros son seres que siempre han estado en mi top de favoritos. Cuando esta saga cayó en mis manos, me pareció diferente a todo lo que había visto antes y por eso me enganchó. Luego, descubrí el concepto del amor tóxico y me percaté de que son una porquería. Las películas están llenas de agujeros argumentales, nada tiene sentido, las actuaciones son malas, la trama es pobre, los personajes son vacíos y las relaciones entre ellos son veneno. Seguramente, mi cerebro estaba en modo avión cuando creí que esto podía tener algún atractivo.

¿Cuáles son sus gustos culposos? ¡Confiésenlos sin miedo!