Ok, este va a ser un apartado polémico. Ante todo, quiero dejar claro que no pretendo desprestigiar a los artistas que mencionaré como ejemplos negativos. Simplemente, deseo argumentar con bases sólidas mi creencia de que las actitudes de los artistas para con sus fans y las personas en general, son tan importantes como su talento. ¿De qué sirve que les hayan hecho grandes aportes al arte, si al final del día se revelan como gente desagradable que desprecian al mismo público gracias al cual ahora poseen fama y fortuna? Habla bastante mal de la calidad humana de una persona el hecho de que se le suba la fama a la cabeza y se vuelva engreída y despectiva, incluso con su propio equipo de trabajo.
Tomemos como ejemplo a uno de los mejores cantantes de habla hispana: Luis Miguel. Me encanta escuchar a Luis Miguel, pero no soporto verlo en vivo. Esto se debe a que se la pasa haciéndole señas a los ingenieros de sonido durante los conciertos para que estén constantemente subiendo o bajando el volumen de los instrumentos, hasta que se oigan como él quiere. Todos sabemos lo bien que se escucha Luis Miguel en directo, pero es que este señor es muy estresante. Entiendo que desee dar el mejor espectáculo posible para su audiencia; sin embargo, esa maña de hacer señas constantes en vivo a los ingenieros e intentar disimularlo con una sonrisa forzada, corta el rollo interpretativo del asunto, además de que me parece una total falta de respeto hacia los sonidistas que el cantante les esté indicando en todo momento cómo deben hacer su trabajo, como si ellos fueran unos novatos cualquiera. Hasta al mejor y más perfecto cantante del mundo le ocurren fallas técnicas, y no hay forma de evitarlo; no es culpa de los cantantes, y a veces ni siquiera de los sonidistas. Y si fuese solo eso, estaría bien. Podríamos pensar que Luis Miguel es perfeccionista, un tanto maniático del control quizá; pero eso es algo que les sucede a muchos de los mejores cantantes, sin que por ello sean necesariamente personas pesadas o con mala leche. No obstante, este hombre va más allá, pues pierde los estribos cuando el sonido no se escucha como él quiere, llegando incluso a lanzarle un micrófono a un sonidista. Creo que eso es pasarse de rosca. Puede ser un ídolo musical; pero un ejemplo a seguir, no es.
En contraposición, tenemos al maravilloso ser humano que es Keanu Reeves. Todavía no he escuchado, visto o leído un solo comentario negativo acerca de su persona. Al contrario, todos los actores y actrices que han trabajado con él hablan de la manera tan gentil en que Keanu procura hacer sentir cómodos a sus co-protagonistas y de las excelentes relaciones que maneja con el resto del elenco. Los directores están encantados de trabajar con este actor tan talentoso y versátil, quien sí es un gran ejemplo a seguir para el resto de la humanidad. Es el actor más querido de Hollywood, y con justa razón.
No me puedo explicar cómo existen artistas con tan malas pulgas, que la emprenden hasta contra sus propios fans. Loco, esas son las personas que te llevaron hasta donde estás. No serías nada si no fuera por ellos. Lo mínimo que puedes hacer es mostrarles un poco de amabilidad. Esto último fue lo que no hizo Axl Rose, durante un concierto de Gun N'Roses. El momento lo encontré en un vídeo recopilatorio titulado “Artistas que perdieron el control en el escenario” y fue la primera vez que vi a la banda; vaya mala primera impresión que me llevé, por eso tardé en escucharla. Al inicio de ese concierto, el público estaba aclamando a la banda y, como no se callaban, Axl Rose tiró el micrófono y se marchó del escenario haciendo una rabieta de niño de cinco años y afirmando que no iba a cantar. Si los hubieran estado abucheando, como en otro ejemplo que vi en el mismo vídeo, lo habría entendido y hasta apoyado; pero hombre, te estaban aclamando. ¿Cómo vas a dejar plantadas a las miles de personas que pagaron por escucharte en directo, solo porque te dio la perreta del día? Sé que el público puede ponerse un poquito pesado y entiendo que cualquiera puede tener un mal día, pero seguro que se habrían callado apenas él hubiera comenzado a cantar. Es una lástima que Axl Rose se gaste tan mal genio, porque es de verdad muy talentoso, tiene muy buena voz y hasta se viste con estilo (me gusta su rollo, lo admito). Empero, no es el tipo de persona que me gustaría para ser mi amigo.
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Las series que marcaron mi infancia
РазноеPorque de repente me han asaltado los recuerdos, me he propuesto atormentarlos un poco con mis nostalgias. Aunque tampoco crean que voy a aburrirlos mucho, pues estos apartados se proponen ser breves y concisos. A pesar del título, no solo pienso ha...