Valentín

64. ¿Podemos hablar?.

Se lo había prometido a Wind. Pero, además, no quería acabar teniendo problemas con la INTERPOL [1]. Y estaba seguro de que si me volvía a encontrar con Valentín esta vez mi amigo me denunciaría por tráfico ilegal de personas.

Esperé, temía que llegara la hora del vuelo y no recibir su llamada. Creo que no he tenido más miedo en toda mi vida de adulto. Necesitaba pensar en otra cosa, así que me dispuse a trabajar. Eso sí, el móvil está pegado a mí, con el volumen bien alto y con la batería cargada.

Una hora, dos horas, tres horas... Se ha ido.

Ring, ring.

El corazón me da un vuelco, la mano me tiembla tanto que al ir a coger el teléfono se me resbala y se cae al suelo.

En mi cabeza una imagen se repite en bucle; un avión lleno de farnags está a punto de despegar. Un hombre castaño se pone en pie y pide por favor bajar. Una azafata le pregunta si se encuentra bien, y éste solo repite que necesita bajar. Tan nervioso se pone que finalmente abren la puerta de embarque y desciende del avión a toda prisa. Corre por los pasillos de un aeropuerto que apenas conoce, tropieza con otros viajeros y tira a su paso unas cuantas maletas. Llega hasta la salida pero antes de tomar un taxi, se para, coge aire, y saca su teléfono móvil para hacer una llamada.

Ring, ring.

En la pantalla ese número extranjero aparece. - Khalan, soy yo. ¿Podemos hablar?-.

Álvaro está al otro lado de la línea. Él no sabe que no puedo hablar, y se debe de pensar que es por culpa de la barrera lingüística. Cambia de idioma para ver si obtiene mejores resultados.

- Sorry Khalan. I'm Álvaro, I wanted to know if Valentín is with you...I can't reach him and I've seen that he has called me a couple of times [2]
- ...
- If you see him again, could you tell him to call me again? Pleased. [3]

No sé si colgarle, llorar, o lanzar el teléfono por la ventana. Pero el miedo a que a Valentín le haya ocurrido algo me impulsa a intentar comunicarme con su amigo.- Aaaah, ahhh- Sonidos guturales suenan desde dentro de mí.

No puedo hablarle en ningún idioma, no puedo signarle, no puedo enseñarle mi libreta negra... Finalmente le cuelgo.

WhastApp tiene una función de videollamada, así que le llamo a través de su aplicación. Cuando Álvaro contesta, dejo el teléfono sobre el escritorio y me pongo de pie a un par de metros de él. Mi cerebro se ha debido de fundir del todo porque le estoy hablando en lengua de signos. - Hola Álvaro, no sé nada de Valentín desde ayer, pero seguramente esté viajando en dirección a Madrid en estos momentos. Espera a que aterrice en vuestra capital y llámale de nuevo-.

La cara de Álvaro es indescriptible. Cuando termino de signar el silencio entre ambos se hace más visible todavía. - ¿Qué?... What?...-

Y escribo en mi libreta seis únicas palabras, todas ellas en español. "Soy un hombre y soy mudo".

A 10.000 kilómetros puedo escuchar como le está explotando la cabeza a Álvaro.

Escribo cinco palabras más "Cuida de él por mí". Y desconecto la llamada.

[1] Organización Internacional de Policía Criminal
[2] Perdona Khalan. Soy Álvaro, quería saber si Valentín está contigo...No consigo localizarle y he visto que me ha llamado un par de veces.
[3] Si le vuelves a ver, ¿podrías decirle que me llame de nuevo?, por favor.