SEGUNDA PARTE DE THE CRASH
Ha pasado un año y medio desde el incidente. Desde que estos dos chicos se vieron forzados a renunciar al otro. Dylan y Kyle intentan seguir con sus vidas separadas, a pesar de que en el fondo, el corazón de ambos sigue añ...
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Dylan
Apenas había visto a ambos chicos desaparecer por sus respectivos caminos, cuando tomó el teléfono para llamar a Trevor. Solo en aquel momento había parecido caer en la cuenta de lo sucedido y su cuerpo comenzaba a temblar. No pasó mucho tiempo antes de que su amigo y Nora tocaran a la puerta de su habitación. Se veían preocupados y Dylan no podía culparlos, cuando llamó a Trevor seguramente se escuchaba alterado.
Ahora la pareja se encontraba sentada en la cama de Dylan, expectantes. Casi como niños esperando un castigo. Joe estaba en su propia cama, con los audífonos puestos, pero siguiendo cada movimiento del castaño, quien no podía parar de caminar de un lado a otro en la pequeña habitación.
—¿Puedes parar con todo esto antes de que me tuerza el cuello? —pidió Trevor, luego de varios minutos en silencio.
—¿Pasó algo con Erick? —preguntó la chica, mientras se arrastraba hasta el punto de dejar su espalda contra la pared.
Dylan solo negó con la cabeza.
—¿Pasó algo mientras estabas con Erick? —siguió hablando Trevor, seguramente queriendo terminar con aquella tortura.
Dylan volvió a negar solo con la cabeza.
—¿Pasó algo con...?
—Vi a Kyle —soltó de una vez, rehusándose a seguir escuchando suposiciones.
—¿¡Qué!?—exclamaron ambos al mismo tiempo, lo cual hizo que Dylan dejara de dar tantas vueltas.
Nora volvió a la orilla de la cama, claramente sorprendida.
—Cuando dices que lo viste te refieres a... —indagó su amigo.
—A una alucinación, Trevor —dijo con tono serio—. ¿A qué crees? Lo vi, en persona, fuera del edificio. Con la misma distancia con la que estoy contigo. Vi a Kyle.
La pareja intercambió una mirada.
—¿Quiénes Kyle? —preguntó Joe, quien comenzaba a quitarse los audífonos, claramente interesado.
—Es el exnovio de Dylan —le comentó Trevor mientras se inclinaba un poco para poder observarlo. El chico simplemente asintió. —Cuéntanos cómo pasó.
—Estaba regresando de mi cita con Erick y nos quedamos hablando un poco fuera del edificio. De la nada solo miro todo negro y algo me tira al suelo. Abro los ojos y resulta ser Fender —desvió un poco la mirada a sus amigos, quienes seguían escuchándolo con atención—. Lo conozco demasiado como para saber inmediatamente que era Fender.
—¿Quién es Fender? —volvió a preguntar Joe.
—Es el perro de su exnovio —le informó Nora otra vez. La pareja claramente estaba feliz de poder darle los detalles a una persona que no conocía nada de la historia.
