SEGUNDA PARTE DE THE CRASH
Ha pasado un año y medio desde el incidente. Desde que estos dos chicos se vieron forzados a renunciar al otro. Dylan y Kyle intentan seguir con sus vidas separadas, a pesar de que en el fondo, el corazón de ambos sigue añ...
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Dylan
—¿Estás completamente seguro? —le preguntaba el castaño a su amigo mientras caminaban hacia la salida del edificio.
El lunes apenas si había podido comunicarse con Trevor. El chico tenía muy ocupado el primer día de la semana, pero el martes habían encontrado un momento para verse, momento que Dylan había estado esperando ansiosamente. Necesitaba saber todo lo que su amigo había averiguado.
—Que sí, hermano. La chica es solo su amiga —insistió Trevor—. Ella misma lo dijo. Es su «mejor amiga». Y el otro chico también es un buen amigo de él. He de decir que me impresiona, se ven bastante agradables, a comparación de aquel chico castaño del hospital.
—Zeke no era su amigo —le recordó, pero el chico pareció no escucharlo—. A mí también me sorprende, Kyle no es de los que hacen amigos, pero supongo que es bueno ¿no? Eso quiere decir que está bien, que siguió con su vida y lo hizo hasta mejor.
Recibió una mirada amenazante de Trevor. Él se ganaba muchas de esas últimamente, lo cual no lo hacía sentirse orgulloso.
—No importa cómo esté llevando su vida, Dylan, pero si discutiste con él de cualquier cosa, debes arreglarlo —sentenció, mientras caminaban por el sendero a sus habitaciones—. No es que quiera acribillarte ni nada...
—¿Seguro?
—Pero —siguió el chico, ignorándolo—, estoy seguro de que lo último que Kyle quería era pelear contigo. Se acaban de reencontrar, Dylan, después de todo lo que sucedió, ¿no crees que el chico merece un respiro? Dale ese respiro, déjalo explicarse y de paso y aclaren cualquier cosa que tengan pendiente.
Dylan bufó. Honestamente ni siquiera sabía qué era lo que Trevor quería que aclarara con Kyle. La vez anterior ya se habían dicho suficiente. Sí, los dos se habían extrañado, pero ya tenían vidas aparte y les iba bien. No había resentimientos ni nada parecido. No podían ser amigos, eso estaba claro, pero eso no quería decir que automáticamente fueran a detestarse.
—¿Y qué es eso exactamente? —preguntó, cuando no pudo encontrar algo que «aclarar».
—Como sus sentimientos, por supuesto —Dylan dejó la mirada prendida en su amigo—. Tienes que preguntarle si aún siente algo por ti y tú dejarle en claro qué sientes por él. ¿Realmente estás enamorado de Erick o todavía piensas en él?
El chico soltó una risa nerviosa.
—Ha pasado mucho tiempo, no creo que Kyle sienta algo por mí —mintió. Mintió descaradamente. El chico evidentemente seguía sintiendo algo y era cierto que ese sentimiento no estaba claro—. Y, es muy pronto para decir si estoy enamorado de Erick. Me gusta estar con él, sí... lo extraño cuando no está, sí... pero por el momento no quiero darle vueltas a eso.
Trevor rodó los ojos.
—Como mínimo arreglen las cosas, Dylan. Pelearon la última vez, creo que deberían de quedar en buenos términos —se encogió de hombros—. Es claro que no me dirás cómo te sientes con respecto a Kyle ahora, quizá ni tú lo sepas, pero sé que, al menos como amigo, debes extrañarlo, ¿no te parece? O como conocido.
