Dylan
A pesar de que había dicho de todo corazón que intentaría no ocultarle nada más a su novio, ahí se encontraba, ocultándole nuevamente su paradero.
La última semana había transcurrido tranquila, sin ningún inconveniente más que el de Acción de Gracias, en la cual no pudo convencer a Frank que Erick no era como Kyle y no corría ningún riesgo de que le rompieran el corazón. Por no mencionar que se había enterado de algo que simplemente amargó más el día.
—Vamos, papá, sé más amable con Erick, él no me ha hecho nada —le dijo mientras que su novio ayudaba a Linda a poner la mesa.
—No te ha hecho nada aún... —señaló el hombre, confirmando las sospechas de Dylan de que su padre realmente temía que su hijo saliera lastimado nuevamente.
—Él no es Kyle —tomó el valor para decir, haciendo que su padre tuviera una expresión de culpa. Le había dado en el blanco—. ¿Desde cuándo odias a Kyle, de cualquier modo? Ya les dije que no me hizo nada malo, lo que sucedió fue porque la vida así lo quiso.
Su padre suspiró, relajando su postura.
—Yo no odio a Kyle, hijo —le dijo y se veía completamente honesto—. De hecho, le tengo un gran aprecio, pues hizo lo mejor para ti. Sin embargo, ¿cómo sé yo que no pasará lo mismo con Erick? ¿Que sus circunstancias de vida te pongan en peligro?
Dylan pasó de estar irritado a un estado de completa estupefacción.
—¿Sus circunstancias de vida? ¿de qué hablas? —preguntó confundido—. Nunca les conté la verdadera razón por la cual Kyle se fue.
—Tú no, Dylan, pero él sí —Frank echó un vistazo a la puerta de la cocina, tal vez no queriendo que ninguna de las otras dos personas en casa escuchase su conversación—. Kyle, antes de irse, nos explicó por qué era que esos delincuentes te habían atacado y por qué tenía que marcharse.
Ahora, a su estado de estupefacción se le sumó la ira.
—¿¡Qué!? ¿Ustedes sabían que mi novio quería irse y simplemente lo dejaron? ¿dejaron que se marchara?
Su padre volvió a suspirar, esa vez un poco más frustrado.
—Kyle creyó que sería por tu bien y nosotros también. No sabíamos nada de la vida del muchacho, Dylan. Tienes que entender que, como tus padres, si un chico llega a decirnos que te está poniendo en peligro, pero se irá para que estés a salvo, nosotros estaremos de acuerdo con cada palabra —hubo un momento de silencio, en el que el castaño realmente ya no sabía si continuar molesto o simplemente resignarse a cómo habían sucedido las cosas—. De cualquier manera, ¿realmente crees que hubiésemos convencido a Kyle de lo contrario?
El castaño tragó saliva.
—No, por supuesto que no.
«Ni siquiera yo logré convencerlo» se dijo a sí mismo, resignado.
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Collide
Teen FictionSEGUNDA PARTE DE THE CRASH Ha pasado un año y medio desde el incidente. Desde que estos dos chicos se vieron forzados a renunciar al otro. Dylan y Kyle intentan seguir con sus vidas separadas, a pesar de que en el fondo, el corazón de ambos sigue añ...