Rosé y yo +18 (Blackpink)

El show

De camino le conté toda la verdad a Rosé. Mi relación con Karina se había muerto antes de engañarla. Rosé no lo entendió así.

POV Rosé

No podía creer que esta chica que se veía tan angelical pudiera ser una infiel. Tenía miedo de que pudiese hacerme lo mismo. Mis sentimientos estaban todos revueltos. Acabábamos de tener el mejor sexo de la vida y llega su ex a toquetearle la entrepierna y soltarme esa bomba.

Fin POV Rosé

Rosé manejó tan rápido y loca, que temía que chocara con otros autos.

Miré su cara, tenía los ojos rojos. Llegamos a la Pink House. Ya era de noche. Bajamos del auto. Rosé se dirigió a la entrada de casa, pero antes de abrir la puerta se giró hacia mí.

Las chicas ya prepararon tu habitación como pidió la productora, puedes dormir ahí - dijo con una cara triste.

Quedé descolocada, ¿no quería que durmiera con ella?. Entramos a la casa y persiguiéndola hacia la cocina, la agarré del brazo.

¿Qué hice ahora? - pregunté.

Eres una infiel - dijo triste - si lo hiciste una vez, lo harás otra y otra - siguió.

Eso no es cierto - le dije mirándola con tristeza - te expliqué como fue la situación.

Quiero estar sola - dijo quitando su brazo de mi mano.

Sentí como se me partió el corazón con ese gesto. Me fui a mi cuarto, ni siquiera tenía ánimos para comer. Las chicas tenían una presentación al otro día y sabía que sería una tortura. Rosé no quería ni verme.

Sin darme cuenta me dormí vestida.

Desperté al otro día con la bulla de las chicas.

¿Dónde está mi vestido Jennie? Tú me lo quitaste la última vez... - gritaba como si no conviviera con nadie más.

Lalisa - gritó Jisoo - hay más gente en esta casa, gobiérnate - agregó. Jisoo me miró extrañada.

¿Y tú, que haces en ese cuarto?, ¿por qué estás aún con la ropa de ayer?, ¿por qué no estás con Rosé? - preguntaba.

Es una larga historia - le respondí.

Ooooh, problemas en el paraíso - dijo, mientras Rosé salía de su cuarto y me miraba. Salí corriendo al baño para ducharme.

Me perdí el desayuno a propósito, así que fui directo a la van que nos llevaría para la presentación de BP.

En el camino, Jisoo iba jugando con Lisa, mientras Jennie las miraba preguntándose cuándo iban a madurar esas dos. Rosé iba callada escribiendo en su celular, ¿a quién le escribía tanto?. Se dio cuenta que la estaba observando y me miró con el ceño fruncido. Me puse pálida. Mi Rosita jamás me había puesto una mala cara. Giré triste hacia la ventana.

Llegamos y al bajar la productora se acercó desde la otra van.

Muy chicas, denlo todo, mucha suerte - dijo animándolas.

Entramos y las chicas fueron directo al escenario, yo me quedé tras el telón viendo que todo estuviera en orden y bajo control.

Comenzó la música de "So hot". Rosé como siempre se veía hermosa y sus movimientos me estaban matando. La canción ya había terminado y los presentadores estaban despidiendo a las chicas. De repente alguien subió al escenario desde el público. En 1 segundos pude darme cuenta de que era el mismo tipo que intentó acercársele a Rosé en la grabación del restaurante. Tenía algo en su mano. Corrí para detenerlo. Otros guardias lo seguían desde atrás. Estaba a punto de alcanzar a Rosé, pero me puse frente a él con los brazos extendidos, dejándola a ella atrás mio. Sentí una punzada en mi estómago, pero no le di importancia. Los guardas ya tenían al tipo y lo estaban sacando mientras lo golpeaban. Me di la vuelta hacia Rosé.

Todo está bien - le dije, pero su cara era de terror. Yo estaba confundida. Él no la había alcanzado. Rosé miró mi blusa. Bajé mi mirada. Estaba manchada de rojo. Sentí como venía el dolor, eran como miles de agujas pinchándome. Caí de rodillas sin fuerza. Rosé me abrazaba mientras yo no entendía mucho lo que pasaba.

¡No, no, no! - gritaba Rosé con lágrimas por toda su cara. Lisa se agarraba la cabeza sin saber que hacer.

Entre las cuatro me agarraron y me sentaron en una silla. Jennie ya había llamado a la ambulancia. El hospital más cercano quedaba a 50 kilometros, por lo que era mejor esperar a la ambulancia, que podía ir más rápido, que llevarme en auto, sobretodo con el tráfico de la ciudad.

Está demasiado pálida ¿por qué aun no llega la maldita ambulancia? - le decía Rosé a Jennie al borde del colapso.

Necesito un cigarro - les dije decaída. Rosé me miró aún llorando y agarrándose la frente con una mano.

Uno de los guardias puso un cigarro en mi boca y sacó su encendedor. Aspiré y lo retiré con una mano ensangrentada.

Está perdiendo demasiada sangre, debemos hacer algo - decía Jennie. Rosé se agachó y puso su chaqueta sobre mi abdomen, intentando parar la hemorragia.

No quiero perderte - me susurró. Podía ver y sentir su dolor.

Eso no va a pasar - le dije sonriendo con el cigarro en la boca. Solo quería calmarla.

El suelo ya estaba cubierto con mi sangre. Las chicas estaban todas sentadas alrededor mío, en silencio, llorando. Rosé agarraba mi mano y no para de llorar tampoco. Hasta los mismo ángeles hubiera llorado de solo verla tan destrozada.

Se me estaban cerrando los ojos. De repente sentí una alarma.