Rosé y yo +18 (Blackpink)

La familia Park

Desperté al otro día, más adolorida que el anterior. Me quedé un rato mirando el techo, no quería moverme. Rosé despertó y se levantó.

Buenos días, cariño - dijo abriendo las cortinas.

Kiiiiijj, sol - dije imitando un gato. Rosé rió.

Traeré tus remedios - me dijo saliendo del cuarto. En eso entró Jennie.

¿Cómo te sientes hoy? - me preguntó.

Más adolorida, pero con mejor ánimo - le respondí.

Prepararé desayuno y te lo traeré, no quiero que Rosie te intoxique con tostadas quemadas - rió. Yo hice lo mismo.

Bajaré para verlas a todas - le respondí. Ella asintió y salió de la habitación.

Al rato Rosé volvió con por lo menos 8 pastillas diferentes y un vaso de agua.

Benditas pastillas - dije tomándolas todas juntas - ayúdame a vestirme para bajar a desayunar - le dije a Rosé después de tragar.

¿No prefieres que te lo traiga para acá y desayunemos las dos juntas? - me preguntó Rosé.

No es buena idea estar las dos solas en una habitación con una cama... o cualquier cosa donde podamos apoyarnos - le dije con una mirada pervertida. Rosé sonrió maliciosamente.

Ok, vamos a la ducha - me dijo agarrándome para llevarme.

Ya en el baño me sacó todo. Ella también se desvistió. No podía aguantarme tenerla como el universo la echó al mundo y no poder hacer nada.

Aaah Rosie, esto es maldad - me quejé. Rosé solo se limitó a abrir las llaves del agua y meterme en la ducha. Lavó mi cuerpo y mi pelo, mientras hacía lo mismo consigo misma.

Salimos y me secó. Comenzó a vestirme, me puso una polera y cuando estaba poniendo mi ropa interior, sin querer rozó mi entrepierna.

Estás mojada - me dijo.

No sabes cuánto - le respondí. Rosé ya no pudo resistir más. Aún desnuda, se arrodilló y empezó a hacerme sexo oral.

Estás muy dura - dijo. Agarré su cabeza para acercarla más a mi intimidad.

Mmmmmhmm, no pares - le jadeé. En eso entró Jennie.

¡Basta! - nos gritó. Caí a la cama del susto.

Aaaghh - me quejé del dolor, había caído con el brazo malo. Jennie corrió a pararme y terminar de vestirme. Rosé se levantó y puso su toalla alrededor de su cuerpo lo más rápido que pudo.

Jennie, no puedes entrar así - le reclamé aún con la entrepierna en fuego. Rosé se fue a vestir.

Soy yo la que te cuida, así que sí puedo - dijo poniendo la bota en toda mi pierna de forma agresiva.

Auuuchh - me quejé. En eso salió Rosé del closet.

Rosie, te lo advertí, ahora no las dejaré solas en ningún momento - retó a Rosé. Ella solamente afirmó y sonrió un poco avergonzada.

Comenzó a bajar por las escalera para ir a desayunar.

Llamaron mis padres - dijo Rosé cambiando de tema mientras bajábamos las escaleras. Me quedé pálida. Jennie rió - van a venir a verme y quieren conocerte - agregó mirándome. Más pálida me puse.

¿Qué? ¿Cómo saben de mí? - pregunté quedándome quieta en medio de las escaleras.

Puede que les haya contado un poco sobre tí - respondió.